De esa producción, mil toneladas se exportarán a varias ciudades alemanas, pero prácticamente la mayor parte de la cosecha fue adquirida por compradores de Europa, que reconocen la calidad de la miel que se produce en Yucatán por su color, aroma, pureza y propiedades nutritivas.
Los estados de la Península de Yucatán, incluso Quintana Roo, han logrado en los últimos años una importante penetración en los mercados internacionales a través de este producto y otros de origen orgánico, así como derivados.
“En 2014 los apicultores obtuvieron una producción de mil 60 toneladas y en lo que va de este año alcanzaron dos mil 200 toneladas en bodegas, lo que generará una importante derrama económica al sector al cierre de 2015”, destacó Miguel Lara Sosa, presidente de la Sociedad de Solidaridad Social de R.L. Apícola Maya, que agrupa a mil 800 productores yucatecos.
En breve la agrupación iniciará operaciones de la nueva planta que les permitirá envasar botellas y bolsitas de miel, que tienen una fuerte demanda en el mercado local y nacional.