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Propiedad industrial de los Pueblos Mágicos

 

 

De acuerdo con la información pública alojada en el portal del gobierno federal, el Programa Pueblos Mágicos de la secretaría de Turismo exalta los símbolos y leyendas, poblados con historia que en muchos casos han sido escenario de hechos trascendentes para la historia de nuestro país, impulsando lugares que muestran la identidad nacional en sus rincones, con una magia que emana de sus atractivos.

De los 132 registros de Pueblos Mágicos que tiene la Secretaría, sólo tres corresponden a Quintana Roo: Bacalar, Isla Mujeres y Tulum.

Para poder transitar en la vida comercial de la promoción turística, este programa requirió ser registrado como marca ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI), que fue concedida el 16 de junio de 2004, bajo el número de registro 837414 a favor de la Secretaría de Turismo.

Estos programas corren con la suerte de visibilizar el destino y mencionar su denominación y sus características, pero no cumplen con una función de protección, contención o prohibición de la competencia desleal a través del uso o explotación de dichas denominaciones por parte de los particulares respecto de los destinos específicos tutelados bajo el programa. Por ello es necesario registrarlos ante el IMPI para acogerse a una Ley Federal con amplio margen de protección, con criterios jurisdiccionales y con tratados internacionales respaldando dichas normas y a sus instituciones.

La marca turística se define como aquel signo que sirve para diferenciar un destino, dotándolo de características distintivas para generar un mayor impacto en su difusión, con el objeto de captar un mayor número de turistas, en beneficio de una colectividad, lo que la hace un derecho de propiedad industrial de interés público.

En Quintana Roo, gracias a la intervención de la XVII Legislatura se logró rescatar las marcas turísticas Cancún y Caribe Mexicano en los 27 países de Europa y en Estados Unidos, dada la incapacidad de la autoridad administrativa para resolver un tema fundamental para el Estado.

Sin embargo, hoy nuevamente las marcas turísticas se encuentran en alerta, ya que la marca Pueblos Mágicos se encuentra próxima al término de su vigencia, y aún y cuando se trata de una marca propiedad de una secretaría del Estado mexicano, en el supuesto de que caducara afectaría de manera directa a Bacalar, Isla Mujeres y Tulum.

El programa federal Barrios Mágicos se encuentra en un escenario más delicado, ya que hasta hoy forma parte de la solicitud de marca de una persona física para bebidas embotelladas.

Por eso a través de esta columna hacemos un llamado a todos los entes públicos encargados de la promoción turística de los destinos locales y nacionales, para que hagan una correcta gestión de los derechos de propiedad industrial y derechos de autor que administran y que son de todos, ya que en ellos se han invertido miles de millones de pesos durante décadas.

 

Por Lic. Hugo Alday Nieto

Diputado del Congreso de Quintana Roo.

Presidente de la Comisión de Justicia y Puntos Constitucionales.

@Hugo_Alday  Twitter

 

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