Por adeudos fiscales de cuatro años, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) embargó a Interjet para forzar el cobro de tales impuestos.
Según información de medios nacionales, el SAT, a través de la Administradora Desconcentrada de Recaudación local, busca retener 10% de todos los ingresos en efectivo de la aerolínea.
Trascendió que el fin es destinarlos al pago de impuestos pendientes, previo pago de salarios y gastos operativos.
El 19 de julio pasado, un juez federal concedió a Interjet una suspensión provisional contra la designación de una interventora, siempre y cuando constituyera en favor del SAT una garantía equivalente al 10% de sus ingresos mensuales.
Obviamente, la empresa lo consideró “incosteable”, por lo que impugnó el fallo.
Al parecer, se trata de créditos por los ejercicios 2013, 2014, 2015 y 2017, que fueron pagados de manera parcial.
Esto dice Interjet
La aerolínea emitió un comunicado en el que señala que estos cobros son injustos y que seguirá en la pelea.
“Como otras empresas comúnmente lo han hecho, solicitó un amparo el 10 de julio del año en curso, para que se declare la inconstitucionalidad del cobro y pidió la suspensión de la medida. El día de hoy, el Poder Judicial le otorgó la suspensión definitiva”.
Interjet dice que está “aclarando diferencias de impuestos que considera erróneas y por eso las está impugnando”.
Especifica que “cuando el SAT determina un adeudo fiscal, su resolución se presume válida y legal hasta que no sea declarada nula o inconstitucional por un tribunal administrativo o por el Poder Judicial, tal como sucedió el día de hoy con Interjet”.
Sin embargo, dice que “esta situación de ninguna manera afecta a los pasajeros, ni las operaciones regulares de Interjet”.