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Reforma fiscal

Cuando esté leyendo estas líneas ya en el transcurrir del mes de noviembre, estaremos seguros, salvo un “milagro” si es que existen, que Quintana Roo una vez más solo pasa ante los ojos de la mayoría como una esponja, de la cual exprimen todo lo que absorbe sin devolver ni siquiera la cortesía.

A partir del 1 de enero pagaremos 16% de IVA, perdiendo el régimen de excepción que desde que me acuerdo existe en el estado, y que gracias a ello ha sido más competitivo como destino turístico y ha logrado mantenerlo dentro de límites aceptables en el gasto.

Basta ver las encuestas y los estudios. Uno que realizó la empresa Mercer y que se publicó este mismo año, marca a Los Cabos como la ciudad más cara de México, seguida de Monterrey, y en un muy poco honroso tercer puesto está Cancún.

El estudio abarca 42 localidades de la República Mexicana y mide los costos comparativos de un total de 182 productos y servicios, agrupados en nueve rubros: vivienda, alimentos, transporte, educación, entretenimiento, vestido y calzado, cuidado personal, aparatos y accesorios domésticos, y salud.

Los resultados de esa evaluación colocaron en primer lugar “de altos costos” a Los Cabos, Baja California, con un promedio de 108.66%. En segunda posición aparece Monterrey, Nuevo León, con108.61%; le sigue Cancún, Quintana Roo, con 104.03%.

Está claro que a pesar del IVA diferenciado en ciudades no fronterizas como Cancún y Los Cabos ejercían un balance para no dispararnos a los cuernos de la luna. Si se volviera a hacer este estudio en enero, le aseguro que Monterrey va a ser desplazado, ya que Cancún será cinco por ciento más caro y tendremos la ciudad más costosa de México.

Así es, poco les importó que Quintana Roo sea el que genera el 35% de divisas que por concepto de turismo ingresa al país, y que del IVA que se cobra de esos miles de millones de pesos nos regresen muy poco, casi que lo necesario; no conformes se llevarán cinco por ciento adicional.

Sí, tristemente somos un estado que produce una gran riqueza que otros disfrutan, porque la inversión pública es mínima en relación a lo mucho que genera nuestro estado.

Y en cuanto a la reforma fiscal hablo solo del IVA, porque el resto de estocadas son para todos. El IVA es el único diferenciado y que nos afectará, sí o sí, cinco por ciento en nuestro gasto.

 

Régimen fronterizo

Sin duda hay que aclarar que Quintana Roo tiene vigente lo que conocemos como el “Régimen Fronterizo”, que en realidad es el “Decreto de Región y Franja Fronteriza” que el Presidente de la Republica emite cada cinco o seis años, en el que Quintana Roo puede importar alrededor de dos mil artículos a tasa cero de aranceles, situación que beneficia al grueso de los inversionistas, sobre todo a los que surten de insumos a la industria hotelera.

En ese sentido, en otras entidades para importar cualquiera de estos dos mil artículos deben pagar un arancel que va del 20 al 30 por ciento. Es decir, que esto no tiene nada que ver con la iniciativa de reforma hacendaria aprobada por el Congreso de la Unión, depende exclusivamente del titular del Ejecutivo, y según sabemos antes de que termine el año nos darán luz verde para un periodo más.

Es este beneficio y no el IVA el que hace muy competitivo al segmento de compras en materia turística, en artículos como prendas de vestir de lujo, bolsas, joyas y perfumes. Sin embargo, y aunque seguirán teniendo precios por debajo del resto del país y muy competitivos incluso con Estados Unidos, no se salvarán del IVA al 16%.

 

Ni el de consolación

Para colmo de males, y como para nuestros legisladores todo es importante menos lo importante, hace casi año y medio que en el Senado se aprobó el nuevo huso horario para Quintana Roo y en la Cámara de Diputados todo es más importante que darle el visto bueno a un tema que ha sido cabildeado intensamente por empresarios, autoridades e incluso por algunos de nuestros representantes en la Cámara baja.

Y el tiempo se acabó, concluimos el horario de verano y nadie se acordó, o no fue lo suficientemente importante. La verdad es que era una medida que ayudaría mucho a la parte productiva de nuestro estado y que no hubiera quitado mucho tiempo a los diputados, que como sabemos estaban “muy ocupados” en otros temas “de mayor trascendencia”, como el del IVA.

Lo lógico es que cuando entrara el horario de verano se hicieran los ajustes como el que esperábamos, así que por lo menos tendremos que aguardar un año más, un invierno más con días que terminan a las 5:00 de la tarde y con turistas que vienen tras el intenso sol, que para aprovecharlo tendrán que despertar a las 5:00 de la mañana.

 

[editor]Arturo-Medina[/editor]

 

 

 

 

 

Arturo Medina
  • En línea directa
  • Periodista, Director NITU.mx
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