Recojo de más de un centenar de personas con las que hablé en el primer día, la molestia, el enfado, el descontento, por decir lo menos, por la tremenda pérdida de tiempo y dinero que significó ese primer día del Tianguis Turístico de México en su versión 40, en el lugar que lo vio nacer, como se dijo romántica y repetidamente en los politiquísimos discursos inaugurales.
El problema es que el acto inaugural giró en torno a la política y a la figura presidencial y no alrededor de los negocios turísticos, como debería ser.
Resulta que hubo que apersonarse desde temprana hora en el recinto oficial por un brazalete para poder acceder a la dichosa comida con el presidente de la República. Y es tan malo el Consejo de Promoción Turística de México (CPTM), la empresa CREA -esa que desorganiza la parte comercial del Tianguis-, y tan estricto el cuerpo del Estado Mayor Presidencial que caen en lo absurdo.
Una vez dentro seguimos esperando y esperando mientras el mandatario efectuaba el recorrido por los stands del tianguis en solitario con su séquito y gobernadores en turno, pero sin presencia empresarial. ¡Vaya incongruencia!
Finalmente aparece Peña Nieto, gobernadores, gabinete, séquito y toda la parafernalia; comida y discursos. No me detendré en ellos ni repararé en los detalles, no vale la pena.
Lo que quiero compartir con mis ocho lectores es la frustración que genera el que se privilegie una vez más y como siempre la política, los discursos y la imagen presidencial antes que los negocios. Y lo más grave, se soslayó la asistencia y presencia de los mayoristas, agentes de viajes y compradores de todo el mundo que vinieron a comprar México. A ellos se les sienta en la última fila, se les niega el acceso y se les relega, como a cualquiera, porque lo que se prioriza es el paso del presidente de la República. Qué lamentable.
Y mal estamos, como dijera un distinguido empresario, quienes además aplaudimos los discursos.
Lo positivo y lo negativo del Tianguis
Peña Nieto fue el único de los oradores en la comida de inauguración que agradeció la presencia de los mayoristas y compradores internacionales. A los demás se les olvidó, porque estaban muy preocupados en agradar al mandatario.
Bien también el discurso de Pablo Azcárraga en nombre del Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET), que incluyó cinco propuestas concretas que fueron bien aplaudidas, ojalá las pudiéramos tener. Hasta ahí, lo demás como ya dije fue un desastre.
Positiva la participación de los empresarios turísticos, que a sabiendas de que podría no ser un Tianguis exitoso asistieron. Ahí estaban José Chapur, Carlos Constandse, Alex Zozaya, representando a sus grupos; Best Day, Lomas Travel y muchos grupos hoteleros y agencias de viajes, demostrando no solo interés en el negocio turístico sino solidaridad. Destacó entre ellos el Grupo Oasis Resorts, que no solo acudió al tianguis comandado por Pedro Pueyo en persona, sino que amenizó y entretuvo con su elenco artístico durante las citas de negocios y nos ofreció un tremendo espectáculo en el coctel de Quintana Roo, demostrando una vez más vanguardia en la escena, profesionalismo y desde luego espíritu de equipo. ¡Felicidades!
Como siempre, de lo mejor en Acapulco son los restaurantes, buenos, variados, trendys, sofisticados, de mariscos o de carne, asiáticos o mexicanos, hay de todo y para todos, siempre con la posibilidad de esas inmejorables vistas panorámicas.
Lo negativo de lo negativo fue la poca asistencia de compradores de buen nivel.
Más allá de las siempre alegres cifras oficiales, que hablan de miles de citas, muchas de las cuales ni siquiera se concretan, lo cierto es que el encuentro es cada vez más pobre en negocios, y este fue así de manera notoria. Una cosa es el discurso e informe oficial de la Secretaría de Turismo (Sectur) y otra cosa es lo que dicen de viva voz los asistentes.
Negativo también el tema de la transportación; por una parte los taxis de Acapulco son caros y malos, malísimos, y la transportación oficial rotativa organizada por el CPTM dejó mucho que desear en tiempos y frecuencias.
De los hoteles, pues cada quien hablará según le fue en la feria. Ojalá cambie el futuro para el querido Acapulco, son mis deseos sinceros.
- Al buen entendedor
- Presidente de la AMATUR
- Presidente del centro de atención de salud mental y prevención de adicciones "Vital"
- sgrubiera@acticonsultores.com