¿Qué consejos te daba mamá para ahorrar?

por Latitud21 Redacción

Ser mamá es una labor multidisciplinaria que demanda mucho tiempo, pues siempre están dispuestas para atender las necesidades de los hijos. Además, cada vez más mujeres en México combinan la maternidad con un trabajo de tiempo completo. Según cifras oficiales, en el país 43.4% de las mujeres que tienen al menos un hijo, trabajan. A pesar del tiempo que pasan fuera de casa, siempre están ahí para tomar el papel de maestra, chef, psicóloga o simplemente para darnos un buen consejo.

Y es que todas sus enseñanzas siempre nos acompañan en nuestro día a día y también podemos aplicarlas a nuestras finanzas personales. Por esta razón, ahora que se acerca el Día de las Madres en nuestro país, recordaremos algunas frases de mamá que siempre te decía y que funcionan como tips financieros en tu vida adulta:

“No gastes todo tu dinero en una sola cosa”

Cuando mamá daba este consejo seguramente se refería a que no te gastaras todo tu “domingo” en una visita a la tiendita de la esquina. En tu vida financiera, este consejo se traduce en una palabra: “planeación”. Al elaborar un plan de ingresos y egresos (un presupuesto), y teniendo presentes tus metas financieras, podrás evitar gastar de más en la primera tentación que se te ponga en frente, como esos zapatos que te gustaron pero que no necesitas o ese nuevo gadget que acaba de salir a la venta. Si tus finanzas no están tan sanas como desearías, una planeación periódica te puede ayudar a ponerlas en orden nuevamente.

“Si no vas a utilizar la luz, apágala”

Claro, a mamá le preocupaba el gasto de energía porque quería evitar cobros excesivos en el recibo, ayudar al planeta y cuidar las finanzas familiares. En el ámbito económico, ahorrar es igual de importante, pues esto permitirá alcanzar tus metas financieras a corto, mediano y largo plazo. Para ello, recuerda utilizar la fórmula: Ingresos – Ahorro = Gasto.

Adicionalmente, cuando realices tu presupuesto, reserva una parte para tu retiro. Es recomendable que para este rubro utilices un 10% del total de tus ingresos y ese dinero lo puedes depositar como Ahorro Voluntario en tu Afore. De esta forma tendrás mayores posibilidades de mantener tu estilo de vida actual en el momento en que dejes de trabajar.

“Aléjate de las malas influencias”

Probablemente, durante tu infancia y adolescencia, tuviste un amigo o amiga que no le agradaba mucho a tu mamá y fue cuando te dio este consejo. Financieramente hablando, las “malas influencias” son las personas que te recomiendan guardar tu dinero debajo del colchón, en el frasco de galletas o en el libro que nadie abre nunca. Si pones tu dinero ahí, comenzará a perder su valor adquisitivo, por no hablar del riesgo latente de perderlo. Por esta razón, es recomendable guardarlo en algún medio formal o incluso invertirlo. Recuerda que para ser inversionista no se requieren grandes sumas de dinero, ni tener mucha experiencia, siempre que cuentes con asesoría adecuada y profesional.

“Fíjate bien antes de cruzar la calle”

El mensaje de mamá se puede traducir como “prevenir accidentes”. La prevención es un elemento que nos puede ayudar a hacer frente a diversos imprevistos, sin embargo, no siempre estamos listos para ello. En este sentido, para blindar tus finanzas ante un hecho inesperado, es recomendable contar con un fondo de ahorro para emergencias. Así podrás reparar la tubería que se rompió, pagar una cuenta de gastos médicos o el deducible por algún accidente en automóvil. Es recomendable que tu fondo sea de 3 meses de tus ingresos y para poder consolidarlo, incluye este rubro dentro de tu planeación quincenal o mensual hasta que tengas la cantidad deseada. Solo asegúrate de reponerlo si algún día lo llegas a usar.

Mamá es una de las personas que más enseñanzas nos comparte, siempre con un solo objetivo: que nuestras vidas sean lo más felices posibles. Por eso, aplicando sus consejos a tu economía seguramente podrás lograr todos tus objetivos financieros.