Para los que les gusta lo bueno, sabroso y nutritivo, aunque sea comida rápida, aquí encuentran un amplio menú en el que destaca la salsa y masa hecha en casa
“Más sabrosa, Mejor cocina”, es uno de sus principales slogan, que más que eso, es la carta de presentación de Jack’s NY Slice Pizzería para ofrecer platos con ingredientes hechos en casa, con la garantía de que todo es fresco y con alta calidad culinaria, pues a pesar de ser comida rápida, en la cocina hay chefs profesionales y creativos.
El gerente Pedro García, explicó que es un negocio que nace de la visión por satisfacer la necesidad de un nicho de mercado para una pizza que no sea chatarra pero que sí cumpla con la rapidez y conveniencia, en un mercado acaparado por cadenas norteamericanas.
“Hoy vemos la manera de juntar rapidez, calidad y precio, para un nicho que demanda un mejor producto, con mayor sabor, pero sin aditivos o colorantes o cualquier cosa que no sea alimento. Sino que busca calidad culinaria detrás de lo que se va a comer; tener una muy buena experiencia aunque lo necesite rápido y a cierto precio”, dijo.
CONCEPTO FAMILIAR Y NEOYORQUINO
Refirió que para el nombre tomaron la figura de Jack, un chef familiar que murió hace poco, a los 93 años, que cocinó desde los 14 años y que trabajó en muchos lugares del mundo. Inspirados en él, tomaron algunas de sus recetas, como la salsa Jack’s, que ya es muy conocida en Cancún y muy solicitada. “Nos enorgullece la reacción de las personas al probarla; incluso mucha gente regresa por ella o nos la pide para combinarla en su casa con quesadillas o cualquier otro platillo”, dijo.
El otro ícono en su imagen es Nueva York, pues recordó que es un lugar conocido por muy buenas pizzerías como Jack’s, que no son cadena sino atendidas por el dueño o familiares; es decir, hay una excelente reputación de ser grandes pizzeros.
El concepto incluye “Slice” porque se enfocan en dos necesidades: una es servicio a domicilio en sustitución a las pizzas chatarra (no porque sean malas, sino por su calidad al elaborarlas para un gran volumen) y en la inmediatez para la gente que trabaja y quiere comer bien, rápido y seguir su rutina. “Son rebanadas grandes, a sólo 29 pesos la más económica. Comes rápido, barato, pero bien”, dijo.
LA DIFERENCIA ES ENORME
Una de las principales diferencias respecto a pizzerías chatarra o de cadena, es la salsa de jitomate. Todo es hecho de cero y a diario. ¿Cómo? En Jack’s, la pizza que hoy ordenas lleva una salsa cuyo jitomate se rostiza por la mañana y que semanas atrás estaba en el campo. En cambio, las otras, la salsa permanece en el refrigerador en una bolsa con conservadores y sólo la calientan cada día para usar. ¿Y el tomate? Ese estuvo hace seis meses en una fábrica procesadora, en México o en el extranjero. Pasó por una congeladora y muchos otros procesos. “Todo eso se nota cuando el cliente prueba el producto; su reacción es distinta, muy positiva, al ver que puede comer una pizza que no es grasosa, que resaltan los sabores naturales que han hecho a la comida italiana tan famosa. El ajo, el jitomate y la masa. Cuidamos cada paso; nada es procesado”, insistió Pedro. Y así como la salsa, también la masa es hecha en el día en casa.
También tienen opciones para los que son veganos. “Detectamos que hay un mercado con tendencias que no están bien atendidas. Un vegano quiere opciones que no sean pobres, sino que se note la pasión y la energía de haber creado un menú especial. Con nosotros es diferente; porque nacimos así, con la más alta calidad culinaria; incluso nuestro queso vegano lo hicimos en casa por un chef contratado para ello”, dijo.
Y para quienes por enfermedad, por cuidarse más o por tendencia buscan sin gluten, ofrecen una masa que hacen al momento y que la gente que es intolerante al gluten la come sin ningún problema.
Es tal la calidad y el esmero que ponen, asegura Pedro, que gente que no comía pizza porque la relacionan con comida chatarra, grasosa o con químicos, ha vuelto a pedirla gracias a lo que encuentran en Jack’s. “Hay mucha diferencia y hay gente que le encanta esa diferencia”, destacó.
VARIEDAD
Hay 14 especialidades y esas mismas 14 con queso vegano o masa sin gluten. La más pedida es la de pepperoni, es muy comercial y gusta a todos, pero hay variedades como cinco carnes, Margarita, Mexicana y acaban de sacar una estilo búfalo, otra con salsa tamarindo, en fin, para todos los gustos.
También manejan sándwiches, alitas, papas, calzones, panes de ajo y con aceite y hierbas; además de postres. Hay dos sándwiches a los que llaman tortas, que valen 59 pesos y la reacción de la gente es muy buena porque son vastas y ricas, con el sello culinario de alto nivel y la pasión por cocinar de los chefs de Grupo Hooters.
CRECIMIENTO
Jack’s NY Slice Pizzería es parte de Grupo Hooters, que en Cancún es manejado por mexicanos, inclusive cancunenses desde hace 15 años, pero la inversión viene de Hooters of America.
La primera sucursal que abrieron fue en 2015, en Cozumel y poco a poco fueron creciendo gracias a la buena aceptación de la gente. Siguieron en Party Center (debajo de Hooters), que fue la primera en Cancún en 2016. Luego vendría sucursal Kabah, Puerto Cancún y la más reciente, en septiembre de 2019, en Polígono Sur. Casualmente, es la única que por ahora está abierta y que siguió atendiendo durante toda la emergencia sanitaria. Desde esa sucursal, daban servicio a gran parte de Cancún.
“Hemos sido cautelosos por la situación. Nos mantuvimos abiertos durante toda la emergencia apegados a los protocolos”, aseguró Pedro García.
Esta sucursal, por estar en un lugar de muchos fraccionamientos cerca, era la de mayor volumen de ventas, y le seguía muy de cerca la de zona hotelera, porque abría hasta altas horas de la noche para atender a la gente que salía de las discos.
IMPACTO DE LA PANDEMIA
La plantilla total de Jack’s Slice NY Pizzería era 47 empleos directos y 94 indirectos, hasta antes de la emergencia. Sin embargo, algunos se fueron a sus lugares de origen por decisión propia, por sentirse más seguros. En Polígono Sur nunca cerraron; les permitieron vender sólo para llevar y en servicio a domicilio. Incluso sacaron un paquete económico de contingencia para apoyar.
Con los empleados que se quedaron hubo acuerdo voluntario y descansos intercalados, la gente estuvo con salario básico y prestaciones. “Hubo pacto solidario entre empresa y empleados”, recalcó Pedro, pues una o dos veces por semana iban a los restaurantes a hacer limpieza o mantenimiento. También estuvieron en contacto con el Sindicato e hicieron un pacto con el gobierno estatal para garantizar el máximo posible de colaboradores.
EXPECTATIVA
Gracias a la buena aceptación de la marca, antes de la pandemia tenían el objetivo de seguir creciendo, y aunque todo se frenó, muy pronto, conforme avance la reactivación, volverán a trabajar en esos planes. “Ya llegamos a un nivel en el que estamos seguros que podemos seguir atendiendo de una forma que la gente siempre va a reconocer la diferencia. Las ventas han ido subiendo con el tiempo, queremos poco a poco seguir ganando la confianza de la comunidad. Sentimos que Jack’s con el tiempo se irá volviendo una pizza local, con una diferencia muy marcada para gente entre 30 y 65 años que le da el valor que tiene. Creemos mucho en lo que vendemos, no por moda, sino porque una pizza con una buena masa, excelente salsa y un buen queso, siempre habrá gente que la prefiera”.
15
años tiene Grupo Hooters operando en Cancún, con
algunas marcas propias, como Jack’s y que tiene
casi 500 empleados
5
sucursales de Jacks en Q. Roo: una en Cozumel
y cuatro en Cancún
2015
nació la primera sucursal, en Cozumel y en 2016 llegaron a Cancún
9.6
millones de pesos fue
la inversión para todas
las sucursales