El tiburón ballena es el pez más grande del mundo, puede llegar a medir hasta 12 metros.
Da inicio la temporada de tiburón ballena (Rhincodon typus) en la Península de Quintana Roo (APFF Yum Balam, RB Tiburón Ballena, al este de Isla Contoy e Isla Mujeres).
México es un país privilegiado al contar con la presencia de esta especie altamente migratoria, capaz de viajar hasta 13 mil kilómetros. Su acercamiento a la península es de mayo a septiembre aproximadamente, siendo la temporada más fuerte de julio a agosto.
El tiburón ballena es considerado como el pez más grande que existe en el planeta, tiene una longitud de hasta 12 metros y un peso de 21 toneladas.
Debido a su naturaleza inofensiva, desde hace más de dos décadas, prestadores de servicios turísticos de la región, realizan actividades de observación del tiburón ballena.
Otras Áreas Naturales Protegidas (ANP), en donde se pueden realizar actividades de avistamiento de esta especie, son en la Península de Baja California (Bahía de Los Ángeles, Bahía de la Paz) y la Costa de Nayarit (San Blas, Boca de Camichín).
Esta especie marina está catalogada internacionalmente como vulnerable dentro la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN, por sus siglas en inglés). A nivel nacional es una especie incluida en la NOM-059-SEMARNAT-2010, considerada como amenazada.
Entre las principales amenazas que sufre, están la captura incidental en pesquerías, que usan redes de deriva y palangre y, las prácticas inadecuadas del turismo de observación y nado.
Desde el año 2008, durante la 2ª Conferencia Internacional del Tiburón Ballena donde participaron representantes de más de 40 países, se estableció el 30 de agosto como el Día Internacional del Tiburón Ballena, con el fin de promover el conocimiento y la conservación de esta especie.
El Programa de Conservación de Especies en Riesgo (PROCER): Tiburón Ballena, de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, trabaja en el análisis de la ecología y hábitat de esta especie, así como en la elaboración de estrategias para su conservación y aprovechamiento sustentable en las costas mexicanas.
La CONANP, además de supervisar las actividades de avistamiento de esta especie, capacita a los prestadores de servicios turísticos para cuidar y proteger su hábitat y mejorando, a su vez, el servicio que se ofrece a los visitantes de la región. Resultado de ello, se han capacitado a guías y capitanes de embarcaciones, sobre el marco legal, biología y ecología de la especie, manejo de grupos, satisfacción del cliente y primeros auxilios.
También se han certificado guías de esnórquel avaladas por la Federación Mexicana de Actividades Subacuáticas.
Personal de la Comisión, se coordina con la Capitanía de Puerto para continuar con la supervisión del cumplimiento de la normatividad de las embarcaciones en cuanto a número de turistas autorizados con los brazaletes que comprueban el pago de derechos que se aplica de acuerdo a la Ley Federal sobre la materia.
Algunas de las recomendaciones para las actividades de observación y nado con Tiburón Ballena están:
Para los turistas y nadadores:
Queda prohibido realizar actividades que incluyan el uso de drones, pesca, esquí acuático, volar en paracaídas, jet-sky, motos acuáticas, kayacs, canoas e inflables a remo, sumergibles, motores a propulsión en el área de observación de TB.
Queda prohibido acosar o dañar de cualquier forma a los ejemplares o interponerse en la ruta de nado del TB.
Queda prohibido ingerir bebidas alcohólicas o sustancias tóxicas o psicotrópicas antes o durante el recorrido.
Queda prohibido montar sobre el ejemplar de TB.
Queda prohibido restringir el movimiento normal del TB.
Conservar una distancia mínima de 5m de la cabeza y 6m de la cola del TB.
No alimentar o hacer ruidos intensos que alteren el comportamiento natural del TB.
Queda prohibido extraer flora y fauna silvestre, es delito federal.
Queda prohibido abordar con ejemplares de flora o fauna, nativas o exóticas invasoras.
Solo se permite utilizar bronceadores exclusivamente biodegradables.
Queda prohibido tomar fotografías con flash.
Queda prohibido utilizar motores de propulsión para nadar cerca del TB.
El observador o turista deberá deslizarse con precaución sobre la embarcación, evitando hacer ruido al entrar al agua.
No utilizar jet-ski en el área de distribución.