Alemania. La plataforma de reserva de viviendas por Internet para fines turísticos, Airbnb, presentó este en la ITB Berlín 2018, nuevas medidas para mejorar el contacto entre anfitriones y huéspedes, frente a las críticas a la sostenibilidad social de este modelo de ofertas.
Las medidas incluyen la introducción de conceptos como el de «Superhost» (Super anfitrión), destinada a aquellos ofertantes particularmente bien valorados por los huéspedes, que recibirán beneficios como créditos de viaje o una mayor visibilidad.
También los huéspedes, bajo el concepto de «Superguest» (Super huésped) obtendrán beneficios como descuentos o la opción de reserva de un alojamiento Airbnb en el último minuto.
Las nuevas opciones de la aplicación «entrarán en vigor a finales de verano de este año», informó el cofundador y director de estrategia de Airbnb, Nathan Blecharczyk.
La popular aplicación de alojamiento prepara también la inclusión de categorías de búsqueda para facilitar el hallazgo del alojamiento ideal para el cliente, como es el caso de las nuevas opciones «Vacation homes», «Bed & Breakfast«, «Boutiques» o «Unique».
La inclusión de estas categorías suponen un paso adelante para una aplicación que, recordó Blecharczyk, contaba «con un diseño demasiado simple» desde su lanzamiento hace 10 años.
Junto a la aparición de la opción «Airbnb plus», que según Blecharczyk englobará «alojamientos de calidad verificada», la aplicación pretende abrir la puerta al lujo y la exclusividad.
«Nos preguntamos qué pasaría si juntásemos la alta hospitalidad con una de las mayores comunidades del mundo», aseguró Blecharczkyk, «por lo que hace un año adquirimos la compañía Luxury Retreats, que cuenta con décadas de experiencia».
Preguntado por los problemas sociales de Airbnb en ciudades con masificación turística Blecharczky afirmó que «el turismo es una tendencia que no va a hacer más que aumentar en los próximos años» y que la aplicación «puede ser parte de la solución».
Actualmente el 75% de los anfitriones de Airbnb se encuentran fuera de los grandes núcleos, lo que para el cofundador supone «una manera de llevar el turismoa comunidades que normalmente no podrían beneficiarse de ello».
El impacto de Airbnb en los últimos años ha llevado a que 400 ciudades de alrededor del mundo hayan cambiado sus políticas para adaptarse a la nueva modalidad de alojamiento de la aplicación, que ha logrado recaudar hasta 500.000.000 de dólares en impuestos.