El llamado oro verde alcanzó los 130 pesos por kilo; situación en la que también se encuentra el pollo, cuyo kilogramo se vende ya en más de 100 pesos.
Datos de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) apuntan que, en la semana del 17 al 21 de junio, el precio de un kilo de aguacate alcanzó hasta los 80 pesos en mercados del país.
Sin embargo, el presidente de la Asociación de Productores y Empacadores Exportadores de Aguacate de México (Apeam), Gabriel Villaseñor, señaló que ante la poca producción por la temporada de cosecha el precio seguirá incrementándose y alcanzaría los 130 pesos, como sucedió en 2017.
Con información de medios nacionales, Milenio y El Universal, el líder de la Apeam señaló que no hay fruta, y que por efectos de la oferta y la demanda, los precios se elevaron, y que éstos disminuirán hasta que se tenga más producto.
Adelantó que será a partir de las últimas semanas de julio, o principios de agosto, cuando se comience a normalizar el flujo y precio del aguacate.
Entre los alimentos que más incrementaron sus precios en la primera mitad de este mes de acuerdo al Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía (Inegi), se encontraba el aguacate, así como el pollo, chayote, naranja, tomate verde y carne de cerdo.
Respecto al precio del pollo, el Consejo Nacional Agropecuario (CNA), encabezado por Bosco de la Vega, señaló que el aumento de precio se deriva de una menor producción a escala nacional y al alza de ventas a China.
En algunos mercados y centros comerciales del país, el kilo de pechuga se encuentra arriba de los 100 pesos.
De la Vega aseguró que esta subida de precios es temporal, “vienen los ciclos aumenta el precio, sube la producción y al rato baja el precio, entonces esa parte es igual, cuando acaba una cosecha de aguacate suben los precios, inicia la cosecha y vuelven a bajar, son temas de aumentos temporales de costos”.
Con información de Notimex, Milenio y El Universal.