Capítulo III • Los obstáculos

por ahernandez@latitud21.com.mx

¿Cuáles son las causas de que las cosas no estén bien? ¿en qué no lo están?, ¿cuáles son las limitaciones de nuestra visión del mundo que nos impiden actuar correctamente? Todos sabemos que algo (mucho o poco) anda mal, que el mundo no está bien orientado, que la justicia, antigüedad clásica, griega y la bondad, la belleza y la verdad, se nos esconden, y nos cuesta trabajo comprender por qué. En medio de un mundo sorprendente de realizaciones maravillosas -podemos llegar a la Luna-, no solucionamos los problemas entre nosotros y vemos cotidianamente cómo imperan la ignorancia, el dolor, la inseguridad, las guerras, así como los contrastes de riqueza-pobreza, poder-impotencia, etcétera. Si la mayoría deseamos mayor justicia, libertad y bienestar, ¿qué nos lo impide?, ¿cuáles son los obstáculos?

El principal obstáculo es la visión mecanicista y materialista que tenemos del mundo. Y esta visión tiene su origen en grandes pensadores que exploraron el mundo en su totalidad después del Renacimiento.

Si comprendemos que somos lo que pensamos, más nuestra esencia espiritual, nos daremos cuenta de que una visión del mundo mecanicista y materialista nos induce a actuar como en un universo mecánico, como máquinas que consumen y producen.

No deseo negar el enorme fruto de la visión cientificista, mecánica, reduccionista, positivista, materialista, empirista y unilateral que impregna a la sociedad en la economía, la política, la educación, la cultura y el arte, etcétera.

Esta visión desarrolló la enorme tecnología que ahora podremos y debemos utilizar como herramienta y no como fin de la humanidad.

De la enorme lista de pensadores con estas características destacan siete por haber establecido paradigmas que actualmente ejercen una gran influencia en el pensamiento humano.

Las ideas esenciales de estos pensadores pueden resumirse de la siguiente manera:

* Francis Bacon: La naturaleza no está viva, es simplemente materia inanimada en movimiento.

* René Descartes: Todo en el universo es mecánico, toda la naturaleza es inanimada, carente de alma muerta, sin vida.

* Isaac Newton: Para comprender mejor la vida hay que reducirla a sus partes (reduccionismo).

* Carl Marx: Todo se reduce a factores de producción y consumo, así como a la relación entre capital y trabajo.

* Jean-Jacques Rousseau: El ser humano es bueno por naturaleza.

* Habermas: No hay ética, moral o justicia, hay sólo acuerdos de «voluntad general».

* Luhman: No hay necesidad de conciencia, las soluciones se encuentran en la «sociología sistémica».

La combinación de estos paradigmas ha generado una sociedad que no cree en la unidad alma-cuerpo, o, lo que es peor, en la existencia del alma. El cuerpo humano y el planeta se conciben como máquinas, que pueden estudiarse separando el todo en sus partes.

Estos paradigmas dejaron fuera de la ciencia el estudio de la conciencia, a la cual no se le reconoció más realidad que la de sus determinaciones neurofisiológicas, y por eso se limitaron los estudios a la memoria, la percepción y el lenguaje, entre otros. Hasta llegar a Skinner, para quien somos sólo respuesta a determinados estímulos. La visión materialista del mundo se posesionó de la humanidad.

A finales del siglo XX surgieron una serie de científicos, pensadores intuitivos y filósofos que anuncian una nueva visión del mundo. El análisis de la ciencia y el pensamiento de occidente y de oriente están planteando nuevos paradigmas, según los cuales el dualismo cartesiano (que afirma la existencia de dos tipos de sustancias: mental y material) es una ilusión. Por ejemplo, para el físico David Bohr, mente y materia forman parte de lo que él llamó flujo universal, que se describe en su teoría del orden implicado.

Por su parte, Hazel Henderson habla de tres caminos en la época actual:

1.- Zona de ruptura: Es en donde la sociedad y su visión obsoleta del mundo se están desestructurando. Incluye cultura, política y valores tradicionales. Esta es también una zona de guerra que sucede entre ideologías, conflictos culturales y religiones, como en las vidas personales que se despersonalizan.

2.- Zona de bifurcación: Es una zona de tensión y de crisis, de incertidumbre y de oportunidad que origina avances y retrocesos en la vida de cada uno de nosotros.

3.- Zona de formación: En esta zona está surgiendo «la nueva conciencia» del poder y responsabilidad humana. Un diálogo que intenta ser horizontal entre pobres y ricos y en la zona de desarrollo de los nuevos paradigmas.

Nos encontramos, pues, ante una época de cambios planetarios, en todas las dimensiones y campos del ser humano, en sí mismo, en la política, la economía, la cultura y en general en lo que conocemos como civilización.

Estamos ante una nueva visión del mundo, en la que la concepción dual y sus paradigmas, después de rendir su fruto positivo para la humanidad, y de los enormes precios que ésta ha pagado, cede su lugar a una visión integrada de la realidad, un mundo en donde el pensamiento lo ha creado todo, un mundo de unidad, que abarca la totalidad, integrada por partes estrechamente relacionadas entre sí.

Así pues, venciendo los obstáculos podremos avanzar con más fuerza en la integración de ecología y espiritualidad, y así formar nuestra nueva visión del mundo.

Notas al margen 

* Renacimiento: Época que comienza a mediados del siglo XV, en que se despertó en occidente un vivo entusiasmo por el estudio de la antigüedad clásica, griega y latina.

* Paradigma: Modelo o esquema de pensamiento.

Marcos Constandse Madrazo
Ingeniero de profesión, Marcos Constandse Madrazo, además de ser uno de los pioneros en el Caribe Mexicano e impulsor de conceptos únicos para la atracción del turismo, es un escritor que comparte su filosofía de vida, fragmentos de la historia y crecimiento de este destino. Una de sus obras es “Ecología y Espiritualidad”, en la que aporta su interesante visión y propuestas para avanzar en el desarrollo económico de la región, privilegiando acciones que moderen y regulen el consumo, para reducir la huella ecológica, a fin de preservar lo más valioso de la humanidad y que está bajo profunda amenaza: el medio ambiente. Hoy más que nunca este tema cobra relevancia, por lo que en cada edición de Latitud 21 incluiremos fragmentos de esta publicación. Búscalo completo en nuestra web: www.l21.mx.