La reciente aprobación de reformas a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos abre la puerta a la negociación entre México y Estados Unidos para incentivar la pre-internación de turismo
La facilitación de ingreso de casi un millón de turistas adicionales a los 15 millones que recibe Quintana Roo cada año es la bandera que enarbola el sector turístico en apoyo a la implementación del programa de pre-internación entre México y Estados Unidos, que se pondría en marcha como parte de un plan “piloto” en Cancún, Puerto Vallarta y Los Cabos.
A través de un plan definido, las autoridades migratorias estadounidenses tendrían la autoridad desde territorio mexicano para permitir la entrada de personas a su país, lo que sería un incentivo para establecer vuelos directos desde destinos nacionales a ciudades intermedias de la Unión Americana, que hasta ahora solo se conectan a través de los centros de distribución aérea en grandes metrópolis.
Si bien la reciente aprobación de reformas a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos, que permite la portación de armas a funcionarios públicos extranjeros -entre ellos de Migración y Aduana- es un aliciente para abrir una posibilidad real de negociación con autoridades estadounidenses, la instancia federal mexicana reconoce que el proceso llevará más tiempo del esperado, y que, en el caso de Cancún, sugeriría incluso esperar que entre en operación la Terminal Cuatro del aeropuerto internacional, que podría ser el espacio idóneo para el tránsito de turistas que ya tienen autorizada su internación desde territorio nacional a su país de origen.
Incluso, tal vez por lo prematuro del proceso y lo costoso que será para los aeropuertos y aerolíneas , tanto el Instituto Nacional de Migración (INM) como el propio Aeropuerto Internacional de Cancún prefieren guardar silencio.
ANTECEDENTES
De acuerdo con un estudio realizado por el despacho Structura, a solicitud de la Asociación de Hoteles de Cancún (AHC) en 2004, el programa “implicaría abrir la posibilidad de que aerolíneas domésticas de ese país puedan volar a los centros turísticos mexicanos (vía chárter o vuelos regulares), y dejar de prescindir de los aeropuertos internacionales. Lo anterior significaría incrementar la demanda para los destinos mexicanos donde se instalará la pre-inspección”.
Punto álgido en la implementación del programa fue por muchos años la solicitud de portación de armas por parte de los funcionarios americanos en territorio mexicano, tema sujeto a la aprobación de la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos en México, hasta que en febrero de este año el presidente Enrique Peña Nieto envió al Senado una iniciativa de reformas a la ley para permitir a agentes extranjeros de Migración y Aduana portar armas con el fin de realizar tareas de pre-inspección de mercancías y vehículos en instalaciones aduanales, cuyo decreto se publicó en mayo pasado.
En su momento, el mandatario nacional cimentó la reforma en la necesidad de minimizar los “cuellos de botella” en los procesos de despacho e inspección de mercancías, tomando como ejemplo la experiencia exitosa de Estados Unidos y Canadá que a través de un esquema similar han facilitado la operación de un equipo integrador de seguridad fronteriza.
El beneficio para la agilización de los trámites aduaneros y migratorios fue la excusa para impulsar la reforma a la ley. A decir de diputados, con pretextos tales como el combate a la delincuencia o el entrenamiento policiaco y militar, agentes estadounidenses actúan en territorio nacional desde hace décadas, la presencia de funcionarios extranjeros ahora armados pondría en entredicho el rol del gobierno en la protección de la soberanía nacional.
Cabildeo
Durante su visita a Washington, en abril pasado, el gobernador de Quintana Roo, Roberto Borge, trajo a colación el tema de la pre-internación en una reunión con el jefe de Asuntos Internacionales de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Alan Bersin. Sin embargo, la posibilidad, que lleva sobre la mesa más de 12 años, ha trascendido a gobiernos federales y estatales.
El programa consiste en implantar mecanismos de pre-verificación aduanera y migratoria en los aeropuertos de algunos centros turísticos, de manera que turistas provenientes de Estados Unidos puedan realizar los trámites correspondientes en aeropuertos mexicanos.
Encuentro con el embajador
La visita a Quintana Roo de Anthony Wayne, embajador de Estados Unidos en México, quien participó en el X Foro Económico Mundial para América Latina (WEFLATAM) en mayo pasado, también fue una nueva oportunidad para que el jefe del Ejecutivo estatal intercambiara diferentes temas de la agenda del gobierno de Barack Obama y de Quintana Roo.
“Solicitamos el apoyo del embajador para sacar adelante el programa de pre-internación en Quintana Roo, mostrando las bondades que tiene el aeropuerto de Cancún en cuanto a infraestructura”, sostuvo Roberto Borge.
Destacó que el acuerdo mejoraría sustancialmente la conexión con más de 60 aeropuertos locales de Estados Unidos, lo que se podría convertir en más vuelos y más turistas para Quintana Roo.
Cortina de humo
En abril pasado, la iniciativa del Ejecutivo aprobada por la Cámara de Senadores llegó a la Comisión de Defensa Nacional de la Cámara de Diputados, donde, finalmente, se aprobó con 78 votos a favor y 20 en contra.
De acuerdo con el decreto, se reforman los artículos 11, último párrafo; 27 y 28, y se adiciona un 28Bis a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos.
El Artículo 11, que describe las armas, municiones y materia para uso exclusivo del Ejército, Armada y Fuerza Aérea, menciona que podrá autorizarse su utilización, por justificación de necesidad, a quienes desempeñen cargos de la federación, entidades federativas o municipios, así como a servidores públicos extranjeros.
El Artículo 27 especifica que a los extranjeros solo se les podrá autorizar la portación de armas cuando acrediten su calidad de residentes permanentes, salvo en los casos de permisos de licencia temporal para turistas con fines deportivos. También podrá expedir permisos extraordinarios de ingreso y portación temporal de armas de fuego a servidores públicos extranjeros de Migración o Aduana.
El 28 establece que, con base en el principio de reciprocidad, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) podrá autorizar la portación temporal de armas a los servidores públicos extranjeros de Migración o Aduana, acreditados ante el gobierno federal, que participen en la revisión migratoria en los puntos de tránsito internacionales o el despacho conjunto de mercancías en las aduanas nacionales.
Voto en contra y a favor
Uno de los votos en contra para reformar la ley provino de la curul de Alicia Ricalde Magaña, diputada por Quintana Roo, integrante de la Comisión de Defensa Nacional, para quien el programa de pre-internación a implementarse en los aeropuertos fue “el dulcecito” para aprobar la portación de armas de fuego en un contexto más allá de los aeropuertos nacionales.
A favor de la aprobación, el secretario de la Comisión de Defensa Nacional, Fernando Donato de las Fuentes Hernández, de extracción priista, afirmó que con la autorización para que servidores públicos extranjeros en Aduana y Migración porten armas, México requerirá el mismo trato a los nacionales fuera del país”.
De allá para acá
Razón de peso para que sin más demoras el programa de pre-internación se implemente en los principales aeropuertos de México es que se incluye en el Tratado de Libre Comercio entre México y Estados Unidos, destaca Jesús Almaguer, director de la Oficina de Visitantes y Convenciones de Cancún. Partícipe y testigo de las gestiones que desde la administración de Vicente Fox realiza el sector empresarial en Cancún, explica que la discusión partidista en torno a si la presencia de funcionarios armados ponía en riesgo la soberanía nacional frenó las reformas a la Ley de Armas de Fuego y Explosivos y por consecuencia el inicio de operación del programa.
“Entre 2002 y 2003 se hizo un estudio muy completo, soportado en cifras. En ese entonces se estimaba la llegada de 700 mil turistas adicionales. Ahora con la reforma a la Ley de Armas que en su momento fue el principal impedimento se da un gran paso para que más aeropuertos de Estados Unidos, particularmente los del sureste del país, se enlacen con Cancún”, explica.
El estudio elaborado por el despacho Structura, fechado en 2004 y nombrado Mecanismos de Pre-inspección en Cancún: Análisis de Incidencia Económica, arroja datos interesantes aún 11 años más tarde.
Estudio único 2003
“En 2003 el número total de turistas internacionales que visitó Cancún ascendió a 2.1 millones, los cuales registraron una derrama económica de mil 400 mdd. Del total de turistas internacionales que arribaron a Cancún, 76.6% provino de EU y realizó un gasto del orden de mil millones de dólares.
“El mecanismo de pre-verificación podría incrementar el número de turistas a Cancún en 1.7 millones de personas, lo que representaría un aumento de 113.6% respecto al número actual de turistas estadounidenses. Si se considera todo el turismo estadounidense a la Riviera Maya (3.2 millones), el incremento adicional sería de 53.1%.
“En 2003, el número de vuelos chárter y pasajeros transportados que se registraron en el aeropuerto de Cancún representó 67% y 71%, respectivamente. En Cancún el número de pasajeros promedio en chárter es de 162, en comparación con 117 en vuelos comerciales.
“Por cada aeropuerto internacional que se habilitara en un estado norteamericano se generaría un aumento de cinco mil 933 turistas hacia Cancún. En este sentido, el mecanismo de pre-verificación aduanera y migratoria “convertiría” o habilitaría los aeropuertos de Estados Unidos de nacionales a internacionales”.
Como dato relevante, el estudio arrojó que la derrama económica (gasto total de los turistas) aumentaría en mil 100 mdd en cinco años, equivalente a 215 millones por año.
Aunque haría falta un nuevo análisis, Almaguer Salazar calcula que el excedente de turistas no sería menor al millón. Consultado sobre qué hace falta para echar a andar el nuevo esquema, la respuesta apunta hacia “la falta de voluntad política”.
De aquí para allá
Como muestra de cooperación internacional, en noviembre de 2011 México ingresó al programa Global Entry, que facilita la entrada de viajeros confiables hacia Estados Unidos, un sistema que permite dimensionar las ventajas de agilizar el flujo de viajeros entre ambos países.
Beneficiario de Global Entry, el empresario Fernando Barbachano, presidente de Grupo Mayaland, comenta que una vez que se instalen controles migratorios y de Aduana en aeropuertos mexicanos se abren los cielos para muchas terminales aéreas que no tienen categoría de aeropuerto internacional.
“En Estados Unidos hay seis mil vuelos de aerolíneas alimentadoras por todo el territorio nacional. Con el programa de pre-internación podrán volar directo a Cancún, eso significa generar un importante tráfico de pasajeros que actualmente no escogen al destino turístico porque implica un viaje a Chicago, Nueva York, Miami o Houston, donde sí hay servicio de aeropuerto internacional”, agrega.
Desde su experiencia personal con el programa Global Entry, Fernando Barbachano ejemplifica lo determinante que puede resultar para un viajero el fácil acceso al país de destino.
“El Global Entry en Estados Unidos es un elemento más de ayuda. Primero el viajero debe cumplir ciertos requisitos para ser aprobado, pero una vez que es así, al llegar al aeropuerto demora solo unos segundos en pasar por los quioscos de Global Entry para la lectura de su pasaporte, sin tener que hacer trámites engorrosos, quitarse parte de su ropa o ser inspeccionado por un agente”.
«El programa Global Entry representa una oportunidad para mexicanos que viajan a los Estados Unidos. Es un claro ejemplo de la colaboración bilateral entre nuestros gobiernos y nuestro compromiso para una frontera en la que puedan transitar viajeros con mayor eficiencia y garantice los más altos niveles de confianza en términos de seguridad. Global Entry es el paso en la dirección correcta para hacer el viaje más fácil y eficiente, y en este proceso fortalecer nuestros lazos económicos, sociales y culturales. El programa ofrece ventajas inmediatas y notorias para mexicanos que viajan a Estados Unidos, así como también a personas de la misma nación que visitan o viven en la región.
“Actualmente Global Entry cuenta con 1.8 millones de usuarios; ocho naciones en el mundo, entre ellas México, son las que tienen los beneficios.Los servicios del programa los proporcionan 42 aeropuertos internacionales en los Estados Unidos, incluidos varios aeropuertos con los de Cancún y Cozumel, en Quintana Roo, que tienen vuelos directos hacia la Unión Americana o conexiones. Global Entry recibe aproximadamente 50 mil nuevas aplicaciones al mes.
“El año pasado en todo México se emitieron un millón 232 mil 884 visas de turista para los Estados Unidos. En contraparte, más de 10 millones de viajeros estadounidenses visitan México cada año y aproximadamente cinco millones de ellos visitan Quintana Roo.
“Según el Instituto Nacional de Migración (INM), en 2012 el 55% de los turistas extranjeros que visitaron México fueron estadounidenses, así como el mayor grupo de extranjeros viviendo en México son de los Estados Unidos, con el 21% del total. Quintana Roo es el séptimo estado de México con más extranjeros inmigrados. Programas de internación como Global Entry benefician a este número de personas que viven, viajan o hacen negocios entre Estados Unidos y México, acelerando las entradas por aeropuertos designados. Muchos viajeros y empresarios mexicanos ya gozan de los beneficios de Global Entry, permitiendo realizar con más rapidez las visitas de negocios al vecino país del norte, fomentando también las inversiones entre ambos países. Generalmente el tiempo de espera con Global Entry es de menos de dos minutos”.
VIAJERO CONFIABLE
En agosto de 2014, el Aeropuerto Internacional de Cancún instaló en las estaciones migratorias de las terminales 1 y 2 los equipos para dar inicio al programa Viajero Confiable, con un año de atraso en relación con su lanzamiento.
Viajero Confiable es la versión mexicana del Global Entry. De acuerdo con información de la página web del INM, el programa se dirige a viajeros frecuentes entre México y Estados Unidos. Los interesados deberán registrarse en la página del organismo, hacer un pago de mil 372 pesos y agendar una entrevista en la que se le solicitarán documentos personales y datos biométricos. De ser aprobado, su ingreso al país será en menos de tres segundos gracias al sistema automatizado instalado en los aeropuertos de Cancún, Los Cabos y la ciudad de México.
Con la intención de conocer acerca de los resultados del programa, Latitud 21 solicitó información al Instituto Nacional de Migración, delegación Cancún, así como al Aeropuerto Internacional de Cancún, y en ninguno de los casos hubo respuesta. Aunque la información tampoco fluye hacia los organismos relacionados con la actividad turística.