Hace algunas semanas tuve la oportunidad de cenar con un gran amigo mío en la ciudad de Atlanta. Un hombre que admiro por su espiritualidad y sabiduría, por su sencillez y su complejidad. Y en esa cena hablamos mucho y de muchas cosas, celebramos éxitos y logros de un año que agoniza, recordamos momentos de antaño que nos unen y compartimos frases y experiencias propias. Entre todo lo que hablamos, Neill Faucett me dijo una frase que se me quedó grabada como un tatuaje en la frente: “Eduardo, la gente que más amamos en ocasiones es a la que menos vemos”. En ese momento materialicé el efecto de esta frase y lo que me representaba, especialmente cuando apenas un par de meses antes habíamos vivido en mi familia la pérdida de una persona muy amada y querida por todos nosotros, don Mario Domínguez, padre de mi esposa y abuelo de mis hijas.
Don Mario fue un hombre que conocí por más de 30 años. Muchas cosas son las que aprendí de él: su amor por la vida, su dedicación por su familia, su conocimiento en la historia y su pasión por los deportes. Pero la más grande de todas las enseñanzas me la dio al final de su vida, y es el vivir con intensidad hasta el último momento, pues éste puede llegar en cualquier momento.
Más allá del dolor de la pérdida del ser amado, un evento como este irremediablemente te lleva a la reflexión. Nada te hace valorar la vida más que la muerte. Nada te hace valorar más la presencia del ser amado que su propia ausencia. Qué ironías.
Es por eso que cuando Neill me dice: “Eduardo, la gente que más amamos en ocasiones es a la que menos vemos”, realizo la importancia de buscar a todas esas personas que tanto amamos y decirles lo importante que son para nosotros.
Y es que siendo precisamente Latitud 21 una revista para emprendedores, los invito a emprender muchas iniciativas que impacten, no solo en sus negocios, aún más importante, en sus vidas y en la de quienes les rodean. Estas son algunas sugerencias: 1. Sonríe más y enójate menos. 2. Piensa siempre en positivo, es una cuestión de actitud. 3. Ocúpate más del momento y preocúpate menos del pasado y del futuro. 4. Disfruta a los presentes más de lo que extrañas a los ausentes. 5. Habla más y textea menos. 6. Dile a la gente lo importante que son para ti y demuéstraselos prestándoles atención por sobre las redes sociales. 7. Sé generoso con tu familia y con tu comunidad. 8. Sé agradecido con la vida y con Él, que te da todo, pero también con el que te quita algo, pues de ambos aprendes siempre, 9. Respeta las opiniones y sé tolerante, tanto como esperas que la gente respete las tuyas y te tolere.10. Ama incondicionalmente, pues es la mejor manera de poder realizar todo lo anterior.
Pudiéramos decir que el año que inicia, 2017, no es un año especial. No hay elecciones en los Estados Unidos de América ni tampoco habrá elecciones federales en México. No hay Mundial de Futbol ni Olimpiadas, más sin embargo a nosotros nos corresponde hacer del año que inicia un año muy especial, en nuestras relaciones con los seres más especiales. Al final, esto es lo que hará del 2017 uno de los mejores años de nuestra vida, se los aseguro. Enhorabuena y Feliz Año Nuevo.
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