Juan Ignacio Rodríguez, Vicepresidente de Desarrollo de Negocios para RCI Latinoamerica
Cancún y la Riviera Maya, con el 45% del negocio de propiedad vacacional en México, son ejemplo de desarrollo para América Latina
El auge y calidad de destinos como Cancún y la Riviera Maya dentro de la industria de la propiedad vacacional, que en conjunto representan el 45% del negocio a nivel nacional, los colocan como ejemplo a seguir para el crecimiento del sector en nuevos mercados en América Latina.
Juan Ignacio Rodríguez, vicepresidente de Desarrollo de Negocios para la región de Resort Condominiums International (RCI), señala que de acuerdo a la última cifra anual de 2015, ambos destinos del Caribe mexicano alcanzaron ventas de tiempos compartidos por mil 800 millones de dólares, de los cuatro mil mdd que se colocaron en todo el país, y habla con Latitud 21 sobre el crecimiento de la zona y el potencial que tiene en la materia.
Latitud 21.- ¿Cuál es el reporte actual de la industria?
Juan Ignacio Rodríguez.- Hay que irnos de lo general a lo particular, la industria turística en el mundo crece en promedio cuatro por ciento. En 2015, de acuerdo con datos de la Organización Mundial de Turismo (OTM), las Américas creció un ocho por ciento; en el caso de México se elevó a 9.5% en los últimos dos años, destacando plazas como Cancún-Riviera Maya y Los Cabos con ocupaciones récord, lo que hace en forma natural que los negocios, los conceptos de propiedad vacacional, hayan evolucionado en creatividad, en servicio y en experiencias vacacionales, lo que se traduce en un mejor y más estable tiempo compartido dentro de la región. Para el reporte 2016 (próximo a publicarse) esperamos en la industria de propiedad vacacional un crecimiento de cuatro por ciento.
L21.- ¿Cómo lo traducimos en números?
JIR.- De acuerdo con el reporte 2015, en México se vendieron cuatro mil mdd, de los cuales el 45% fue en Cancún-Riviera Maya. Hablamos de una cifra cercana a los mil 800 mdd, que es muy importante. Alrededor del 42 al 44 % de todas las habitaciones de calidad en playas se destina a una propiedad vacacional, lo que quiere decir que compañías que eran típicamente hoteleras incursionan de manera importante y agresiva dentro de este mercado con beneficios contundentes, como el hecho de que un turista gasta unos 750 a 800 dólares por estadía, cuando en el caso del tiempo compartido disponen del doble debido a que la estancia es más larga, con seis días en promedio. Es un turismo repetitivo y además nos hace marketing, porque si hacemos bien las cosas la experiencia se lleva de boca en boca.
L21.- ¿Hay en puerta nuevas firmas interesadas en incorporarse al esquema?
JIR.- Ya no quedan muchas y es un tema que viene desde hace 20 años; las cadenas a nivel mundial, regional y nacional incursionan ya en el mercado y casi todas están de alguna u otra manera teniendo algún tipo de programa de lealtad, club vacacional o tiempo compartido. El crecimiento viene de las marcas ya conocidas, particularmente en Cancún-Riviera Maya y Los Cabos –los tres destinos punteros a nivel nacional- e incluye inversiones muy importantes por parte de Hard Rock Hotels, Karisma Hotels, Solmar, AMResorts, entre otras.
L21.- ¿Cuál es el volumen de unidades o semanas que manejan a nivel global?
JIR.- A nivel México se vendieron el equivalente a 209 mil semanas en 2015 y al cierre del 2016 se esperaría, de acuerdo con nuestro reporte anual, un crecimiento cercano a las 211 mil semanas. Cancún y la Rivera Maya tienen prácticamente el 45% de estas ventas, seguido por Cabos con el 24%. Lo que también es un reflejo del número de habitaciones de la región. Cabos tiene una cifra cercana a las 14 mil habitaciones, cuando en el Caribe mexicano hablamos de más de 80 mil.
L21.- ¿Cuáles son las perspectivas para 2017?
JIR.- Se estima un crecimiento conservador debido a factores como la devaluación del peso, lo cual si bien es cierto ha favorecido el flujo de turistas de Estados Unidos y Canadá, por otro lado destinos como Cancún y Los Cabos se vuelven más caros para el mercado doméstico, comportamiento que sucede de igual manera en Sudamérica.
L21.- ¿México es ejemplo para la región en esta materia?
JIR.- Cancún y Riviera Maya son ejemplo a seguir en cuanto a calidad de producto, creatividad, y evidentemente no solo los competidores nacionales sino también los internacionales ponen la vista en ello. Esto sucede en tiempo compartido y el turismo el general. En el turismo ya no hay muchas barreras y todo lo que está en un radio de cuatro horas alrededor de Estados Unidos son nuestros clientes o nuestros competidores.
L21.- ¿A nivel país cuántos desarrollos están afiliados a RCI?
JIR.- En México hay unos 549 desarrollos destinados a propiedad vacacional, no todos están activos en ventas, de los cuales tendremos un 70% del mercado. En el Caribe mexicano la cifra ronda en 200 desarrollos afiliados.
L21.- ¿La problemática que rodea al Todo Incluido afecta al tiempo compartido?
JIR.- Cuando tocan estos temas complicados no es que quiera contestar en forma diferente, pero cuando hay productos que tienen venta es una tendencia del mercado y el mercado manda; por más que queramos cambiar eso, la discusión o la forma proactiva de atacar estos temas es qué debiéramos hacer para que propicie más economía a la región, ser creativos, pues si el mercado demanda este tipo de productos, seguimos creciendo así o se van a otro lado, a Dominicana, a Jamaica, el mercado es un radar, por ello hay que cambiar el foco de la discusión a cómo integrar dentro de la economía de la región los productos que demanda el mercado.
L21.- ¿Cuál es su visión sobre el caso Cuba?
JIR.- El turismo es prometedor ya que Cuba recibe unos tres millones de turistas al año y los analistas dicen que en pocos años podrían ser 11 millones; sin embargo, cualquier cosa que pase en Cuba tendrá que ir seguida de desarrollo de infraestructura, el turismo para que se desarrolle demanda infraestructura, hablamos de carreteras, conexiones áreas, servicios, aeropuerto, y eso puede solucionarse con dinero, pero tomará su tiempo. Tiene un potencial importante por su cercanía con Estados Unidos, pero al final hay mercado para todos.