Nuevas metas

por Latitud21 Redacción

Cooperativas rurales de Quintana Roo y Campeche usan la app para vender sus productos entre la industria turística de Cancún y la Riviera Maya

Con el apoyo del Consejo Civil Mexicano para la Silvicultura Sostenible (CCMSS), familias de comunidades mayas de Campeche y Quintana Roo lanzaron una plataforma para comercializar carbón vegetal, miel y madera entre la industria turística de Cancún y la Riviera Maya, además de abrir un centro de distribución en Playa del Carmen, a fin de atender la demanda de sus productos.

La Plataforma de Cooperación Comercial (Placco), cuyo objetivo es crear vínculos comerciales entre hoteleros y restauranteros del estado, permitirá que familias campesinas que habitan regiones forestales de la Península de Yucatán obtengan mayores beneficios con la venta de sus productos.

Noé Madera, gerente de la Placco, destacó que en la app participan 15  socios de la cooperativa Carbón de Leña Verde, del ejido San Felipe Oriente, en el municipio de José María Morelos, Quintana Roo, y 51 de la comunidad de Usaec, en Calakmul, Campeche, de la que se beneficiarán alrededor de 420 personas de ambas comunidades.

A través de Placco, las cooperativas tienen actualmente alianzas comerciales con el hotel Rosewood Mayakoba y Grupo Karisma Hotels, además de los restaurantes Ipanema´s y Harrys Grill, este último del Grupo Anderson’s, así como también están en pláticas con seis corporativos hoteleros, entre las que destacan Vidanta, AM Resort y Grupo Experiencias Xcaret, además de algunos cafés.

El ejecutivo comentó que entre Rosewood Mayakoba y los dos restaurantes con los que ya se establecieron lazos comerciales adquieren al mes cerca de tres toneladas de carbón vegetal, mientras que el Grupo Karisma Hotels compra a la semana un promedio de 700 kilos de miel para los siete hoteles del consorcio.

“Es una herramienta que les permitirá registrar una derrama económica mensual de casi 62 mil pesos por la comercialización del carbón vegetal y miel, además de lo que genere la venta de madera procedente de selvas legalmente aprovechadas en los municipios de José María Morelos y Calakmul”, explicó.

Madera señaló que la proyección para 2018 es elevar las ventas de carbón a seis toneladas y a tres de miel. “Consideramos que en este año crecerá mucho la colocación de los productos de ambas cooperativas, ya que la industria turística de Cancún y de la Riviera Maya es una zona de oportunidades. Tenemos el centro de distribución de Playa del Carmen con una capacidad para almacenar ocho toneladas de carbón”.

En el lanzamiento de la plataforma, Sergio Madrid, director del CCMSS, indicó que “en repetidas ocasiones se escucha de esfuerzos emprendidos en Quintana Roo, a fin de generar vínculos entre el sector turismo y las organizaciones rurales, sin resultados visibles. Sin embargo, el crecimiento constante del desarrollo turístico de la entidad conlleva el consumo de productos, por lo que es una oportunidad para los productores locales”.

Anastacio Oliveros, presidente de la cooperativa de Usaec, explicó que la miel multifloral que se comercializa a través de Placco proviene de una producción orgánica y del manejo sostenible de casi siete mil 500 hectáreas. “Para que la apicultura se desarrolle bien es necesario conservar las selvas y mantener una agricultura de bajo impacto, como la milpa o los huertos familiares”.

Por su parte, Nicolás May, coordinador de Carbón de Leña Verde, dijo que el  carbón que ofertan bajo la marca ‘El brasero del Oriente’ tiene un origen legal y se procesa siguiendo principios de inclusión social. “Tenemos un programa de manejo forestal para el aprovechamiento sustentable de 627 hectáreas de selva, mismo que cuenta con la autorización de la Semarnat”.

Asimismo, se sostienen plática con la cooperativa U Lool Che, integrada por 115 apicultores de 21 comunidades de José Ma. Morelos y Felipe Carrillo Puerto, para formar parte del CCMSS. Esta comunidad cuenta con una superficie de 14 mil 813 hectáreas para la apicultura y una capacidad para acopiar 145 toneladas de miel. (Marlene Hernández)