El 2018 no pinta muy bien en cuanto a crecimiento económico, ya que si bien se prevé un 2.4%, analistas financieros opinan que no es acorde a la realidad que se vive
Recién inició 2018, un año que se prevé difícil en diversos aspectos, principalmente el económico, en el que incidirán factores como la incertidumbre, producto del proceso electoral y la renegociación del Tratado de Libre Comercio (TLC), además de la evolución de las tasas de interés y la reforma fiscal en Estados Unidos, por lo que el panorama no se ve muy claro en cuanto a inversiones y crecimiento se refiere.
Si bien en lo que respecta a crecimiento económico diversas entidades como la Organización de la Naciones Unidas (ONU) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) pronostican que será de 2.4%, a decir de expertos en la materia se trata de un cálculo optimista que muy probablemente no se logre, y aun cuando así fuera la inflación es mucho más alta, ya que cerró 2017 por encima del seis por ciento, lo que resta poder adquisitivo a los consumidores.
El panorama nacional no parece muy alentador; sin embargo, en lo que se refiere a Quintana Roo, “el caldo se cuece aparte”, ya que al ser un estado eminentemente turístico el nivel económico es superior al de muchos estados, no olvidemos que Cancún genera casi 50% del Producto Interno Bruto (PIB) en el rubro de turismo en el país gracias a la alta afluencia de viajeros, basta mencionar que durante la reciente temporada de fin de año arribaron al estado –según cifras oficiales- 915 mil viajeros, quienes propiciaron una derrama estimada en 720 mdd.
No obstante esta bonanza turística, los expertos señalan que se debe poner especial atención al problema de la inseguridad, ya que los constantes hechos delictivos que se reportan generaron que por primera vez Quintana Roo fuera mencionado en las alertas de viaje emitidas por el Departamento de Estado de la Unión Americana, lo que en un primer momento, a decir de hoteleros y otros actores del sector, derivó en una baja en la llegada de visitantes.
Cifras optimistas
Definitivamente la economía nacional no crecerá según lo proyectado. No sé de dónde sacan esa cifra, yo creo que el crecimiento será apenas del dos por ciento, porque hay inflación, los altos impuestos han reducido la proporción en que se invierte. A mayores impuestos menos inversión, entonces considero que no hay factores internos para hablar de ese crecimiento.
“Antes crecíamos en la medida en que lo hacía EU, ahora nos hemos despegado de EU, que cerró 2017 con crecimiento; en 2018 probablemente tenga mayor crecimiento, pero en México no se ha despegado. Nos ha aumentado la deuda, la corrupción, pero no los índices de crecimiento.
“Por otra parte tenemos el proceso electoral encima, lo que afecta por el clima de incertidumbre en torno a los candidatos, los partidos se han desdibujado, están haciendo promesas, pero no sostenidas ni pensadas en el país que recibirán. Quien reciba el gobierno lo tomará con una deuda alta, con muchos problemas en toda la república en cuanto a seguridad, en cuanto a tener que pagar varios estados todo lo que se llevaron sus exgobernantes.
“Consideramos que no hay ningún precandidato hasta ahora que haya dicho lo que va a hacer, y aunque lo diga va a recibir un país con bajo crecimiento, con más inflación, tenemos la más alta de este siglo, de 6.8% al cierre de 2017, y si se quiere que la inflación ceda tendrán que bajar gastos, frenar un poco la demanda y en el primer semestre no creo que el gobierno esté interesado en hacerlo”.
Mejor Panorama
“Por otro lado, Quintana Roo es una cosa excepcional, considero que será un buen año porque va a haber un crecimiento fuerte en EU, creación de empleos, y esto nos va a beneficiar; el problema es la inseguridad, cualquier evento de inseguridad es un factor que se magnifica y afecta.
“Si hay un control de la seguridad en Quintana Roo aparejado con una política de precio en la que no quieran adelantarse a la inflación ni a la devaluación, si presentamos un panorama de buenos precios y se controla la inflación, para el estado 2018 será un muy buen año.
“Quintana Roo podrá salir adelante en la medida en que se controle la inseguridad; al igual que en todo el país hay incertidumbre y ese es el mayor veneno para la inversión. Mucha inversión va a esperar a que haya candidatos, a que aterricen sus programas, entonces sabrán si invierten o no y esto tiene que tomarse en cuenta para que no nos subamos a ese carro de la espera. Una cosa es la macroeconomía y otra es la economía regional o empresarial, el que presente buenos servicios y precios podrá librar el 2018, pero el que espere a que la situación se componga pues se va quedar esperando y tendrá un mal año”.
Preocupación por el TLC
Sobre el TLC desafortunadamente las expectativas son negativas; aunque a mi juicio es más grave una baja de impuestos en EU sin una baja de impuestos en nuestro país que una mala negociación para México. Sin embargo, si se cancelara el tratado habrá mayor dificultad para México para exportar a EU, las exportaciones en la mayoría aumentarían como tres o cuatro por ciento los impuestos, pero si hay inflación en México, si hay un aumento de costos interno, va a hacer más daño que la falta de un buen tratado,
“El no tener tratado sería otro elemento de incertidumbre, ya que la industria automotriz es la responsable de 30% de nuestras exportaciones, pero hay una expectativa y esa se puede ver potenciada con la baja de impuestos en EU, aunque se negocie el tratado; esa baja le va a quitar competitividad a México y habrá empresas que se vayan, no porque se termine el tratado sino por lo atractivo de invertir en EU”.
Incertidumbre política
“La situación es difícil, pero no se va a acabar México, lo que podemos esperar para este año es un bajo crecimiento, una alta inflación, una incertidumbre porque no se sabe cuáles son las políticas que se aplicarán.
“Esa incertidumbre, esa falta de inversión en el primer semestre va a pegarle a la economía en general. Lo que puede ser que la salve son las exportaciones a EU, porque habrá un mayor crecimiento en ese país y con eso habrá una mayor afluencia de turistas a sitios como Quintana Roo, en la medida en que se controle la inseguridad, que es en lo que se debe trabajar de manera urgente”.
Inflación elevada
El crecimiento económico prospectado es real, pero desgraciadamente traemos una inflación muy elevada -arriba de seis por ciento-, que se refleja en los bolsillos de la gran mayoría. El crecimiento lo marcan principalmente las áreas que están en auge, como el sector turístico en los polos de desarrollo, como esta zona, y los polos manufactureros de exportación, primordialmente los que tienen que ver con autos y refacciones, ellos van muy bien, son los que van impulsando el crecimiento, pero a nosotros no se nos refleja en el bolsillo, en cambio la inflación sí nos pega a todos.
“Sin duda el proceso electoral es una de las variables que genera incertidumbre alrededor de lo que es la estabilidad económica, en este caso debido a las elecciones, pero también por el alza de las tasas en México; también hay incertidumbre porque aún está pendiente la renegociación del TLC, que amenaza con alargarse hasta después de las elecciones cuando lo ideal hubiera sido que en 2017 se renegociara; hay un factor más que también nos pega de manera directa, pero que igualmente va a terminar golpeando la economía nacional, y es la reforma fiscal que se da en EU y que se teme se reflejará de algún modo en México. En consecuencia todos estos ingredientes generan una incertidumbre que tienen al dólar con diversas variables.
Los beneficiados
“Afortunadamente los polos turísticos siempre van a la inversa cuando la situación se complica en el valor del dólar; la mayoría de los visitantes que llegan al estado gastan en dólares, para ellos su moneda vale más ahora, por lo que hay más derrama, porque gastan un poco más. Esto se refleja en muchos sectores, sobre todo en los que trabajan directamente con el de la hospitalidad, como taxistas, lancheros y todos los que tienen trato directo con el turismo y reciben pago o propinas en dólares”.
Inseguridad en Quintana Roo
“La inseguridad es otro factor que afecta a la economía, sobre todo en estados turísticos como Quintana Roo, porque creo que estamos al borde de la línea de lo que es la inseguridad local y la afectación al sector turístico y la imagen que se da con tantas noticias de muertos en todo el estado, sobre todo en la zona norte; casi todos los días hay reportes de ejecutados, lo que mancha la imagen de seguridad que por muchos años tuvo la zona.
“Acabamos de pasar un año con las peores cifras en ese sentido y eso podría afectarnos en el sector turístico y en consecuencia en la derrama económica. Las autoridades tienen que hacer algo urgente para frenar todo lo que está pasando con la delincuencia”.
Complicado inicio de año
“De manera muy general el primer trimestre continuará en la incertidumbre total, seguiremos viendo el dólar con fluctuaciones; ojalá que las gasolinas no se sigan disparando, ese es otro segmento de incertidumbre, por lo menos todo el primer trimestre, pero podría alargarse hasta el segundo por aquello de que vienen las elecciones para el 1 de julio. Esperaríamos que después de las elecciones viniera la calma en los mercados y en todos los sectores de la economía para que pudiéramos tener un fin de año más estable”.
Reajuste a la baja
En general el Banco de México habla de un crecimiento de 2.4%. Me llamó la atención lo dicho por Bank of America Merrill Lynch. El economista en jefe, Carlos Capistrán, decía que México crecería en 1.6%, que ese 2.4 no era algo tan real. Algo que me hace pensar que Merrill Lynch tiene razón es que suele sucedernos en economía, ya que más o menos en agosto reajustamos nuestros pronósticos y generalmente lo hacemos a la baja. Entonces empezamos muy positivos, pero no, y si le agregamos que la inflación cerró arriba de seis por ciento en 2017, tenemos un panorama difícil en cuanto a precios y crecimiento que sí le va a impactar al país, quizá no será 1.6, pero 2.4 es demasiado positivo.
“El 2018 es un año electoral y justamente por eso es la duda del Bank of America, porque en estas condiciones muchas cosas suelen detenerse debido a la incertidumbre entre inversionistas nacionales y extranjeros, porque al final de cuentas no saben quién va a quedar en el poder, qué partido, y eso los detiene.
“Algo que también puede forzar a que se ralentice la economía es que para detener la inflación estamos esperando que el Banco de México en breve anuncie qué va a pasar con las tasas de interés, y para controlar la inflación generalmente la política monetaria tiende a subir las tasas de interés y esto lo que hace es controlar el gasto; es una de las medicinas adecuadas para regular la inflación, pero obviamente tienes a menos gente gastando, lo cual implica que se ralentizan los demás sectores”.
Renegociación del TLC
“Eso es justamente algo que nos tiene pendientes, tenemos que ver qué pasa con sectores como el agrícola, las empresas que están aquí y gente de Canadá que dice que sería bueno cortar el tratado. Yo no creo que se corte, sí creo que debe continuar, pero es de esperarse que las negociaciones se van a hacer muy lentas este primer semestre, van a esperar a que llegue el nuevo gobierno y cuando sepan quiénes pueden definir las cosas es cuando realmente se van a empezar a agilizar, por obvias razones, y por otro lado está un Trump que es explosivo y creo que el mismo gobierno federal no está teniendo todos los ‘amarres’ que se requieren, y tal vez lo está dejando para que el siguiente gobierno vea cómo lo arregla”.
Caso aparte
En el caso particular de Quintana Roo, en general tenemos dos cosas: la parte de la inversión extranjera y la de los turistas, en este último rubro hay algo positivo, pensando en que EU tal vez crezca, ahí tenemos una cuestión positiva, ya que es nuestro mayor mercado, entonces muchos norteamericanos verán crecer su economía y estarán en posibilidad de viajar.
“Pero esto tiene dos caras. ¿Por qué? Porque desgraciadamente estamos viviendo problemas de inseguridad; si la gente tiene posibilidad de viajar difícilmente le agradaría el turismo de aventura y riesgo en el sentido de ir a un lugar en donde están teniendo problemas de inseguridad. Tenemos que poner muchísima atención en esa situación, porque aunque EU crezca si seguimos teniendo warnings eso nos va a afectar.
“Y en cuanto al factor de la inversión tenemos la misma incertidumbre por parte de los inversionistas. Aunque el gobierno de Quintana Roo cambió hace más de un año, el inversionista extranjero tiene más una visión global, no tanto de la localidad, y tal vez algunas inversiones se puedan detener un poco pero al final prosperarían si ven una continuidad en el gobierno local, tal vez no serían tan fluidas pensando en que haya elección federal pero sí habrá inversión”.
Año complicado
“Hay que ser precavidos; hay quien dice que será un año muy complicado, creo que más por la cuestión electoral que por la económica. El Banco de México ha estado actuando muy bien los últimos años, ha sido bastante prudente.
“La situación es la cuestión de las reformas, que se analicen y permanezcan, y hay que ver también qué va a pasar con la cuestión de los energéticos y con la gasolina y sus precios, porque tuvimos en 2017 una inflación de seis por ciento global, pero donde estuvimos casi a 14% fue en el rubro de los energéticos, entonces ahí vamos a ver qué pasa con las nuevas situaciones en esa área”.
Empleos insuficientes
Desgraciadamente los pronósticos de crecimiento son bajos, deberíamos estar creciendo un seis por ciento, con una generación de 1.2 millones de empleos anuales; estamos generando solo 800 mil, con crecimientos mínimos con respecto a lo que debería ser. Ante el panorama internacional, como una propuesta fiscal de EU con disminución de tasas de interés, nuestro país sigue sin tomar medidas y eso nos resta competitividad.
“Otra situación que debe tomarse en cuenta es el proceso electoral de este año; desde la Coparmex opinamos que no debería afectar la economía, pero son realidades que distraen a los funcionarios públicos porque hay compromisos, los gobiernos actuales tienen compromisos que hicieron con los ciudadanos y están cortos en sus metas, eso debería ser su principal objetivo, no los temas electorales sino el cumplimiento de sus propuestas”.
Inversión y turismo
“En el plano estatal el panorama se ve más positivo, pero no deja de ser sensible; tenemos el tema latente de los warnings, eso puede ser dañino para el turismo; el mismo crecimiento, las ofertas de otros destinos o el mismo turismo de EU, que muchos ahora prefieren el consumo interno, ponen en desventaja a México para que pueda ser receptor de inversión extranjera. En cuanto a turismo hay inversiones, se prevé crecimiento; si bien es cierto lo que falta para completar ese crecimiento es infraestructura, y eso vendría forzosamente de los gobiernos”.
Recorte de gastos
Dadas las circunstancias macroeconómicas que tenemos es difícil una mejora en las condiciones económicas, ojalá que lo logremos, todo depende de las variables que tengamos, porque estamos en año electoral, cuando hay recortes en el gasto público, en la inversión; también tenemos que ver todo lo relacionado con el TLC, ver cómo quedarán las condiciones y cómo nos afecta, y esas son cuestiones que no sabemos en este momento.
“En el rubro del turismo tenemos que apostarle a que la promoción se siga haciendo en forma intensa por parte del gobierno y la iniciativa privada, de tal manera que podamos mantener el flujo de visitantes e incrementarlo, y que ese turismo que nos llegue sea de alto nivel, que deje una buena derrama en el destino y que todos se beneficien”.
Diversificación económica
“En cuanto a las perspectivas económica a nivel estado, creo que serán buenas en la manera que mantengamos el ritmo de crecimiento dentro de nuestra propia localidad; puede que haya claroscuros, porque tenemos un sector turístico muy fuerte y brillante, pero también está la otra parte, la de la población que no está muy ligada o de primera mano al turismo y que no crece al mismo ritmo; sin embargo, de alguna manera la derrama económica siempre llega a permear hacia esas capas sociales.
“Este es el momento de apostar por la diversificación económica, buscar otras oportunidades de ser más productivos para que podamos compensar esas desigualdades que pudiéramos tener”.