Fallece don Nassim Joaquín ‘El tatich de Cozumel’

por Latitud21 Redacción

 

Este Viernes se confirmó el fallecimiento de don Nassim Joaquín, pionero de Quintana Roo y padre del gobernador electo Carlos Joaquín González y del secretario de Energia Pedro Joaquín Coldwell.

La revista Latitud21 publicó en su oportunidad un artículo sobre su vida y el trabajo que desempeño para el potencial desarrollo de Quintana Roo.

Todo el mundo le conoce como el Tatich, vocablo maya que en español significa algo así como patriarca. Se trata de Nassim Joaquín, un hombre sencillo que siempre ha estado en el poder.

Don Nassim ha sido anfitrión de reyes y presidentes, de artistas y de intelectuales, pero siempre está ahí, tomando café y charlando con los parroquianos -en su negocio del centro de la ciudad-, al alcance de cualquier cozumeleño que le busque. Digamos que Nassim despacha desde esa «mesa mágica» que le da una visión periférica de todo cuanto ocurre en la isla, de lo político y hasta de lo que no es.

Nassim Joaquín Ibarra es hijo de un matrimonio de origen libanés que se asentó en Felipe Carrillo Puerto a principios del siglo pasado, cuando el ejército federal se apoderó de esta población haciéndola la capital de Quintana Roo. Este «triunfo» duraría escasos años pues la ciudad le fue devuelta a los mayas rebeldes que aún seguían siéndolo. Esta inestabilidad política provocó que don Pedro Joaquín, su esposa Rosa Ibarra y sus hijos Miguel, Aurelio y Alfredo optaran por irse a vivir a Cozumel, y ya bajo la protección de la Isla de las Golondrinas nacieron otros tres hijos: Nassim, José y Emma.

Los Joaquín siempre han sido hombres de negocio, esa fue la herencia cultural que don Pedro les legó, de modo que desde muy jóvenes crecieron al amparo del buen comercio. Atendían personalmente la Casa Joaquín , una tienda de abarrotes, un salón de billar, una fábrica de hielo y una refresquería que se instaló en el centro histórico de Cozumel.

Si bien es cierto todos ellos han sido destacables, mención aparte merece Nassim, anfitrión -para no variar- de los primeros turistas norteamericanos que llegaron a la isla de Cozumel en 1949, y el hecho lo recuerda perfectamente bien: «Les renté tres recámaras con servicio y cocinera por cinco pesos diarios».

Pionero del turismo contemporáneo, don Nassim Joaquín recibió del gobernador del Territorio de Quintana Roo, Margarito Ramírez, la concesión del Hotel Playa y más adelante tuvo su propio hotel: Los bungalows Playa Azul, estructura que fue destruida en su totalidad hace cinco años para construir un moderno hotel: Playa Azul.

El Tatich es un hombre que olfatea los negocios y cambia de giro cuando su intuición se lo indica. No le hace caso a los estudios de mercado, más bien se deja guiar por sus propios sentidos, y un ejemplo de ello es el Centro Comercial Joaquín -desde donde charlamos-, que en diciembre de 2003 cumplió 32 años de existencia, creado en sus orígenes como el más moderno supermercado de la isla pero que, ante la llegada de las cadenas, el empresario fue modificando paulatinamente hasta dejarlo como una tienda selecta de regalos, perfumería y licores.

-¿Participa la familia en sus negocios? Parece una pregunta ociosa conociendo la formación que tuvo de su padre.

«Sí, por supuesto. Mis hijos, mis nietos. todos nos involucramos en el negocio.

¿Cuál ha sido la clave de Nassim Joaquín para sortear las crisis que a menudo se presentan en los negocios?

«La diversidad. Alguien dice que no se deben poner todos los huevos en una sola canasta. Yo tengo negocios que tienen que ver directamente con el turismo pero otros que no; por ejemplo, el negocio del combustible o la venta de cerveza, eso no te afecta, la gente lo consume porque lo tiene que consumir».

Don Nassim no es el clásico empresario de pueblo que se limita a negocios locales. Y muestra de ello es que por algún tiempo fue socio de la empresa regional aérea TAMSA, también fue concesionario de Mexicana de Aviación y, además, fundador y propietario de la compañía Aerocozumel.

Lo que sí recuerda, y con mucho orgullo además, es que cuando recién se habían iniciado las obras de Cancún el presidente Luis Echeverría Alvarez le invitó a un recorrido aéreo y desde las alturas le dijo: «Nassim, escoge tu terreno.», a lo que el empresario cozumeleño simplemente respondió: «No señor, a mí mejor déjeme en Cozumel».

Así es Nassim Joaquín, un hombre enamorado de su isla; una isla que le ha dado dos hijos: Pedro y Addy Joaquín Coldwell, y el cariño y respeto de sus coterráneos quienes le siguen atribuyendo poderes casi míticos, que por supuesto no le caen nada mal.