Ya hemos hablado que en septiembre de 2015 la Organización de las Naciones Unidas (ONU) lanzó la nueva Agenda de Desarrollo al 2030, representada en los Objetivos del Desarrollo Sustentable, un marco para alcanzar bienestar en el mundo en el largo plazo. He de comentarles que ese mismo año, justo un mes después, la misma ONU declaró el año 2017 como el Año Internacional del Turismo Sostenible para el Desarrollo, reconociendo la importancia de esta actividad y sobre todo el papel que puede jugar en la conservación y el desarrollo social.
Pero, ¿por qué es importante que el próximo año la ONU y sus miembros (incluyendo México, por supuesto) lo dediquen a la sustentabilidad en el turismo? Bueno, es un reflejo de la necesidad de hacer un turismo más responsable, más justo, más equitativo y con beneficios para todos los sectores de la población.
Y esto no es poca cosa, en especial en un estado como Quintana Roo; las oportunidades que gobierno, pero en especial empresas, tienen el próximo año para cambiar sus prácticas, para avanzar en la sustentabilidad, para consolidar sus programas de responsabilidad social, y en especial para hacer una comunicación efectiva de sus acciones, están a la vuelta de la esquina.
Y no sé si ustedes ya están preparados para ello. ¿Ya tienen información sobre las celebraciones? ¿Ya han sensibilizado a sus colaboradores al respecto? ¿Ya apostaron por tener una certificación que les permita mejorar sus prácticas y medirse con los mejores? ¿Ya participan en programas de inversión e innovación social? ¿Ya tienen pensado cómo comunicar a sus clientes sus acciones en sustentabilidad?
Si es así, felicidades. Seguramente serán empresas que en el 2017 sobresaldrán del resto, y lograrán demostrar que existe un importante compromiso por seguir avanzando en lo económico, siempre de la mano de la conservación y el desarrollo social.
Si no están listos, o si no tenían información de esta importante celebración que durará todo el 2017, tal vez deberían cuestionarse si la gestión de la sustentabilidad realmente la están llevando a cabo de forma adecuada, y si sus departamentos de medio ambiente o sustentabilidad están siendo realmente estratégicos para la toma de decisiones. Porque tener un departamento que se encargue de resolvernos los temas legales ambientales, y que gestione permisos, no es más que la base de lo que debiera ser un área especializada y del más alto perfil.
Sé que muchas empresas trabajan fuerte por el cumplimiento de las acciones legales y se preocupan por llevar su gestión ambiental en regla, e incluso optar por certificaciones de las autoridades para cumplir estos requisitos; pero les tengo una mala noticia, si eso no lo acompañan de estrategia, si no van más allá de la ley, si no trabajan por su comunidad, si no generan proyectos transformadores, si no compran local o regional, si no buscan alternativas a su energía u otros insumos, y si no comunican, se están quedando muy muy atrás de la tendencia, y de otros que son líderes en el tema.
Y si la tendencia, en especial 2017, viene avanzando hacia un lado, más vale alinearse o de plano nos podemos quedar en el camino y ver cómo los demás aprovechan estas oportunidades y sobresalen.