El Turismo es la gran alternativa para 2015

por Latitud21 Redacción

Ante el poco alentador escenario de la economía mexicana que no crece como se esperaba y dista mucho de llegar al “anhelado” tres por ciento, con el precio del barril de petróleo por debajo de los 50 dólares, con un peso tan devaluado como la imagen y popularidad del presidente, con unas reformas estructurales que no convencen y con un escenario de inseguridad en diversos estados del país, se antoja el turismo como la gran alternativa, aunque al parecer nadie en el gobierno se ha dado cuenta de ello.

En medio de este caos y luego de las tragedias del pasado otoño de triste memoria, saltan a la vista, sin embargo, los alegres números de la actividad turística en los principales destinos de playa del país, destacando sin duda Cancún y la Riviera Maya como indiscutibles líderes del escenario turístico.

Si bien la reforma fiscal es un desastre y no solo no alienta la inversión sino que además es falso que genere mayor recaudación, habrá que reconocer que a pesar de ella el turismo siguió creciendo y los viajeros, tanto nacionales como extranjeros, continuaron favoreciendo con su preferencia nuestras playas. Es decir, que nuestra querida y noble industria sobrevivió a los yerros del ilustrísimo Sr. Videgaray.

El turismo, tan noble y magnánima actividad económica y social, sigue creciendo y generando empleos a pesar de las barreras y obstáculos que impone el sistema, de la ineficacia de nuestros gobiernos y de la falta de leyes y esquemas de fomento.

En medio de un escenario tan adverso como el que vive México, brilla el turismo como una estrella que podría significar una tremenda alternativa de desarrollo económico y mejor calidad de vida para muchos mexicanos si se le atendiera de manera seria, sistemática e integral como hemos reclamado desde hace tantas décadas.

Las grandes barreras siguen ahí, muchos de los retos siguen sin atenderse y el diagnóstico parece no cambiar en gran medida. Las áreas de oportunidad se repiten sin cesar en una y otra entrega, en uno y otro foro, en mesas de trabajo, en talleres de discusión y en serias y sentidas misivas.

Migración y Aduana, vendedores ambulantes, condominios que sin regulación compiten deslealmente con la hotelería, falta de libertades para el transporte turístico terrestre, imagen urbana que se deteriora, fideicomisos de promoción que no son transparentes, y un sinfín de etcéteras que hacen tortuoso el quehacer turístico. Y sin embargo se mueve…

Uno de los grandes retos de México como destino turístico es lograr un sustantivo incremento en las estancias promedio de nuestros visitantes. Si bien Cancún y la Riviera Maya son exitosos con estancias promedio de seis y hasta siete noches, el resto del país sufre teniendo que conformarse con paupérrimas estancias de 1.5 y dos noches aun en ciudades y rincones mágicos y encantadores de nuestro querido México, simplemente porque no son competitivos, porque faltan incentivos para generar desarrollo de productos, porque falta imaginación, porque la promoción es ineficiente y obsoleta y porque pesan siempre esas tremendas barreras que dificultan nuestra actividad.

Pero aun destinos como Cancún deberían tener estancias más largas y mejores niveles de gasto del turista. Quintana Roo y la Península de Yucatán son por sí mismos multidestinos que deberían propiciar estancias de 14 y 21 días. Tenemos todo para competir con Europa; el inventario de bellezas paisajísticas, cultura, tradiciones y recursos naturales es inconmensurable, pero mientras existan esas infranqueables barreras y sigan sin generarse esquemas de fomento e incentivo serios el turismo seguirá marginado, pudiendo ser la enorme alternativa de desarrollo económico de México.

La Secretaría de Turismo está ausente, su poder de interlocución es mínimo, la legislación para nuestra actividad es inexistente y lo único con que se cuenta es con el discurso.

Estamos pues en este 2015 frente a una nueva y generosa oportunidad para cambiar el statu quo, es esta la oportunidad que tiene el gobierno y empresarios de trabajar solidariamente en equipo por México haciéndose valer del turismo.

Pronto será tiempo de elecciones, dense cuenta distinguidos suspirantes del enorme reto que enfrentan. No hemos tenido hasta hoy congresistas que se ganen nuestro respeto, ya es hora…