Nomás tantito

por ahernandez@latitud21.com.mx

Alejandro Rosel

Comunicador y conductor

Twitter: @AlejandroRosel7

¿Cuántas veces hemos escuchado esa frase y que retumba en los oídos de cualquier persona con tantita educación cívica? Yo muchas, aplica en el día a día de muchas personas que en la secundaria o no fueron a clase de civismo o se quedaron dormidos. Son muchos los ejemplos en los que se usa esta expresión tan común en los mexicanos y que sin duda es por demás irrespetuosa del derecho de los demás. Parar en segunda fila, en un área para personas con discapacidad, en lugares no permitidos, meterse en la fila, exceder los límites de velocidad, en fin… es una interminable lista. El principio del “respeto al derecho ajeno”, es algo que se nos ha olvidado en el convivir entre todos. En estos meses tan difíciles de la pandemia de Covid-19, tratar de cambiar esta manera de pensar ha sido uno de los grandes retos y no lo estamos logrando. Cada día que pasa, los casos positivos de esta enfermedad aumentan. Los gobiernos estatal y municipales han trabajado incansablemente en poner las condiciones para proteger a la población de este mal y el resultado no ha sido nada bueno. La gente hoy hace su vida como si nada estuviera ocurriendo, salen sin cubrebocas, acuden a lugares públicos para divertirse, paseos en yates, a pasar el día a los hoteles y simplemente el Covid se nos olvidó. Los esfuerzos de todos los empresarios del destino por tratar de conservar empleos y reactivar la economía, han sido notorios, pero hoy es muy claro que están en riesgo, ya que gracias a la falta de conciencia, al ‘NOMÁS TANTITO’, los casos siguen aumentando, las muertes igual y esto ha llevado de nueva cuenta al confinamiento a la capital del estado. Situación que durará al menos 14 días desde su inicio el pasado 7 de julio. ¿De que sirvió que te cuidaras todos estos meses, si en un fin de semana o en cinco días hábiles te contagiarás por imprudente, irresponsable o porque crees que ‘nomás tantito’, no te afectará y librarás al Covid? Te tengo una mala noticia: Sí te afectará, si no tú, alguien de tu familia será víctima de tus imprudencias. Todos los días, escucho a alguien que se dice harto de estar encerrado y no poder ir a la playa, a un bar, de compras, a comer con los amigos o simplemente actuar con libertad, sin cubrebocas o caretas. Sin embargo yo les pregunto: ¿Qué estás haciendo para que esto acabe pronto?, seguramente nada. Hoy quiero hacer un llamado a todos a no permitir que la frágil economía se frene, que detengamos el incremento de casos y que logremos controlar y mitigar la pandemia. Sé que es difícil, que debemos de aprender a convivir con ella, pero justo eso es lo que se nos olvida. Busquemos alternativas para seguir generando recursos, pero con estrictas medidas de salud, que nos ayuden a evitar más contagios y sobre todo muerte. Hoy el bienestar de los tuyos depende únicamente de ti, de nadie más. Salir de la situación en la que nos encontramos y no detener más la economía, también. Espero se encuentren bien, al igual que sus familias. Que el camino sea divertido y exitoso. Hasta la próxima.