Oportunidades, derechos y obligaciones

por ahernandez@latitud21.com.mx
  • Nelly García
  • ngarcia@latitud21.com.mx

Inicia este mes un nuevo capítulo en la historia de Quintana Roo, lo que significa que se abren oportunidades en diversos sentidos. Hay muchas expectativas con la llegada de una nueva autoridad al Ejecutivo estatal, que además es la primera mujer. 

Diversos sectores confían que haya mejores oportunidades para todos, que se respeten los derechos y sobre todo, que haya avances en situaciones apremiantes que aquejan a las familias. La seguridad y la economía, por encima de todos, sin duda, ya que son las condiciones que más duelen a las mujeres, a los hombres, a niños y ancianos por igual. Si hay violencia, si la gente no puede salir a las calles con la certeza que no será víctima de la delincuencia, todo se desequilibra. Y por supuesto, si la población no encuentra espacios para desarrollarse y generar ingresos, los hogares no funcionan adecuadamente. 

Es preciso que no sólo Mara Lezama, a partir de que asuma como gobernadora, sino también el resto de su gabinete, entiendan que estas prioridades deben ser atendidas con prontitud, con honestidad y con efectividad. La gente ya no puede seguir esperando por soluciones.

Vaya revuelo que causó el Consejo Nacional Para Prevenir la Discriminación (Conapred) con su comunicado, justo al inicio del ciclo escolar 2022-2023, en torno al corte o tinte de cabello de los estudiantes. 

Con su recomendación a los directores y maestros a respetar los derechos a la educación y al libre desarrollo de la personalidad de niñas, niños y adolescentes en las instituciones escolares, sólo generó desconciertos y opiniones encontradas. 

En algunos planteles argumentaron que llegó tardíamente, así que sus reglamentos, elaborados antes de este comunicado, se mantenían intactos. Es decir, que lo que diga el Conapred se queda en mera sugerencia y que los alumnos deben cumplir con una “imagen recomendable”, como ha ocurrido hasta ahora. 

Pues sí, al final, queda en cada quien, cumplir o no con algo que es sólo sugerencia y no una orden.