La seguridad privada es una alternativa para la población que cada vez con mayor frecuencia es víctima de la delincuencia…
El incremento en los índices delictivos en Quintana Roo genera un aumento importante en la contratación de servicios de seguridad privada en destinos turísticos como Cancún y Playa del Carmen, prestaciones que anteriormente eran exclusivas de algunos segmentos de la población, pero hoy en día son contratados por amas de casa, padres de familia y jóvenes.
Compañías como Guardian Global Security Group y Dillmann Security Service, que tienen presencia a nivel nacional, registraron un aumento de 20 y 80%, respectivamente, en sus servicios, mientras que GS Seguridad Privada, empresa local con más de siete años de operar en Cancún y Playa del Carmen, reportó en los últimos tres años un crecimiento de hasta 60%.
Lo que hace más de 20 años era poco habitual en Cancún, hoy en día cada vez son más las personas que recurren a este tipo de empresas que brindan desde seguridad física, tecnología, caninos, protección civil y logística hasta alarmas y monitoreo GPS, entre otros servicios. Actualmente, en Quintana Roo hay cerca de 350 compañías en el sector.
De acuerdo con el Consejo Nacional de Seguridad Privada (CNSP), en México alrededor de seis mil empresas prestan servicios de protección y resguardo; sin embargo, solo tres mil cuentan con un permiso federal o estatal para realizar estas labores.
Hay una mayor demanda de los servicios en nuestra empresa, no solo aquí sino en todo el país, derivado del alto índice de inseguridad que hay. Nuestro país es muy sui generis porque está en una zona geográfica donde suceden muchos fenómenos.
“La realidad es que en México encontramos desde tráfico de personas, pornografía infantil, delincuencia organizada, paso de inmigrantes, narcotráfico, pesca ilegal, contrabando, piratería, robo de embarcaciones, robo a transeúntes, robo a casa habitación, inundaciones, huracanes, sismos y erupciones volcánicas.
“Tenemos un cúmulo de circunstancias que provocan altos índices de inseguridad, además de que somos la nación ubicada en el lugar número 138 en corrupción y Cancún ocupa el número 10 de las 50 ciudades más violentas del mundo, además de que como país estamos en el primer lugar de muertes de periodistas.
“Y con todo eso, imagínese el caldo de cultivo que es para los oportunistas que se suman a una falta de cultura de seguridad en nuestra sociedad y la poca integración entre gobierno, sociedad y empresas para formar un solo triángulo fortalecido que ayude a conservar la seguridad, pero sobre todo lograr preservarla en la familia y en la sociedad en general, en la calle, en las empresas y por supuesto a nivel gubernamental.
“A estos fenómenos también se adhieren la oportunidad de utilizar medios de comunicación avanzados que nos permiten enterarnos de lo que pasa del otro lado del mundo y la escasa capacidad para hacer justicia”.
OTROS SECTORES
“Como empresa de seguridad privada estamos en un rubro donde tenemos la oportunidad de servirle a la población, no como hace algunos años que solo era a corporativos y gobierno, hoy en día también al ama de casa, el joven estudiante o el padre de familia.
“En nuestra empresa los servicios crecieron cerca de 20% en todos los sectores de la población. Sabemos que hay desde llamadas de extorsión hasta robo de identidad. En la actualidad el tema de la ciberseguridad es muy importante, ya que todo el mundo maneja un teléfono portátil, correo electrónico y redes sociales.
“Si no cuidamos nuestra comunicación e información, que es un recurso vital para sobrevivir, estamos a merced de los oportunistas que tratan de entrar a la información básica operacional de tu empresa o personal y casi es seguro que termines pagando por ella.
“Con las nuevas tecnologías es muy sencillo obtener información de terceros. Hoy en día pagamos con tarjetas de crédito desde la gasolina hasta un boleto de avión. De esta manera, los oportunistas saben dónde te hospedaste, porque reservaste y pagaste por internet. Todo esto va ligado a tus datos que son referenciados a tu domicilio a través de los recibos del agua, la luz y una serie de servicios que están enlazados con tu información bancaria.
“Por un lado tienes una ley de protección de datos que podrías pensar que estas medidas limitan a terceros a obtener información, pero por el otro vas por la calle dando información vital relacionada con tus hobbies, ocupaciones y pasatiempos. Saben tus hábitos de consumo, simplemente abres páginas que te son útiles, saben qué compras y qué días utilizas para divertirte solo o con tu familia, además de quiénes te acompañan”.
ANÁLISIS DE VULNERABILIDADES
“Cuando te das cuenta que estás a merced de las circunstancias y oportunidades de terceros, no nos queda de otra más que la autoprotección. Esto quiere decir que vas a hacer un análisis de aquellas vulnerabilidades, riesgos y amenazas de tu vida personal-patrimonial.
“A partir de ahí pones candados, cambias las contraseñas de tu computadora, tarjetas bancarias, incluso hasta las chapas de tu casa, de los lugares donde trabajan, y algo tan sencillo en lo que debes poner atención: saber a quién le entregas la información, desde tu empleada doméstica, tu chofer, el escolta, tus empleados, y si ellos accesan a tu equipo de cómputo no sabes qué acciones ejecutan desde tu computadora.
“Estamos en una sociedad donde necesitamos de todos, donde la información viaja muy rápido y es ahí donde debemos poner barreras de autoprotección, desde nuestra casa hasta nuestras oficinas. El sector que mayor demanda tiene es el de seguridad física y patrimonial.
“Hacemos un protocolo de gestión de riesgo que nos permite tener un diagnóstico de vulnerabilidades o un análisis de riesgos más profundo. A partir de aquí desarrollamos un plan de contingencia, de las funciones que se van a llevar a cabo, las consignas, los procesos y procedimientos, así como los protocoles de seguridad y un programa de capacitación, además de estrategias de comunicación para llevarlo a un comité de crisis y saber qué hacer en caso necesario”.
PREVENIR A TIEMPO
“El 70% de nuestras actividades debemos desarrollarlas en la prevención, después el 15% en colocar letreros que digan ‘usted está siendo monitoreado, peligro alto voltaje, cuidado con el perro, prohibido pasar, solo personal autorizado’. Después pasamos a ese 10% de la protección que son la chapa, los candados, cortinas anticiclónicas, bardas, todo lo que nos ayude a proteger nuestras instalaciones.
“Y por último la reacción. En caso de un suceso, ver cuál es el plan, a quién tenemos que notificar. Hay una serie de actividades que van correlacionadas cuando realmente se quiere una cultura de seguridad, pero que debemos de aplicarla desde casa como una metodología normal de trabajo y ver la seguridad no solo como un servicio más dentro de una organización.
“Hay quienes podrán sentirse seguros con poner solo un candado o con cierto tipo de herramientas como un vehículo, una escolta, una patrulla, seguridad canina; tenemos que ver ese costo beneficio en lo que se ocuparía la seguridad también.
“Guardian es una empresa que tiene recursos en materia de seguridad física, tecnológica, patrimonial, logística, canina, protección civil, ingeniería, mantenimiento y limpieza, además de controles, evaluación y confianza. Como parte de estos servicios también manejamos el rubro de blindajes y tenemos la capacidad para las custodias; contamos con una central de alarmas y monitoreo GPS de cámaras y de un sistema integral para el control de personas.
“Tenemos presencia en la Ciudad de México, Monterrey, Guadalajara, Puebla, Veracruz, Cancún y Tuxtla Gutiérrez”.
Desafortunadamente los servicios de seguridad han crecido mucho por la lamentable situación que se vive no solo en Quintana Roo sino a nivel nacional. La inseguridad está en todas partes, pero actualmente la vemos mucho más en el estado ya que Cancún y Playa del Carmen son ciudades pequeñas, donde antes no había los altos niveles de inseguridad que hoy se registran en estos destinos.
“La inseguridad en Cancún creció mucho en los últimos años y con ello la necesidad de contratar empresas privadas de seguridad, pero el factor problema es que muchas empresas de seguridad no están debidamente registradas, a las que se les llama comúnmente ´patito´.
“Dillmann es una compañía que está en 28 estados del país, entre ellos Baja California, Puebla, Yucatán, Querétaro y Ciudad de México, además en ciudades como Monterrey y Toluca, entre otras. La sede principal está en Cancún y la demanda de nuestros servicios a nivel nacional aumentó 80%.
“Somos una empresa que brinda diversos productos, desde a una tienda chiquita hasta a un corporativo, ya que tenemos servicios de escoltas, de investigaciones, seguridad canina, traslado y venta de equipo; es muy amplia nuestra gama. Antes no era así, seleccionábamos a nuestros clientes, pero ahora también tenemos del sector hotelero, industrial, residencial, comercial y grupos de choque, estos últimos son para cuando se invaden terrenos; todos estos servicios son los más solicitados en la compañía”.
MIEDO A SALIR
“La mayor demanda la tenemos en Quintana Roo, también en Querétaro, pero es otro tipo de servicios. Lo que sucede actualmente es que las personas tienen miedo a salir, muchas de ellas ya no salen con relojes, cambiaron sus autos por algo más sencillo, mientras que otras optan por vehículos blindados.
“Por parte de turistas cabe mencionar que estos son transitorios y a veces nos piden grupos de escoltas porque son personas importantes, como artistas que llegan a la ciudad y necesitan que los custodien, pero la demanda de los servicios en este sector es baja en comparación con la vida diaria normal de la ciudad.
“Hoy en día estamos en otra situación, conocemos los medios operantes de los asaltos y esto no es grato, pero por el lado de negocio, Cancún, Playa del Carmen y la Riviera Maya son los destinos que solicitan mucho nuestros servicios.
“Por mes tenemos de cuatro a cinco clientes nuevos, lo que significa que la demanda va de 20 elementos por un cliente o el más bajo de dos”.
EXPERIENCIA Y PREPARACIÓN
“En Quintana Roo hay cerca de 350 empresas de seguridad privada, es un sector que crece porque las personas lo ven como un negocio. Sin embargo, hay quienes no tienen idea de cómo manejar una compañía de esta naturaleza; ven que es exitosa, pero por ejemplo en el caso de nosotros hay muchos años de experiencia y preparación, además de que los nuevos negocios cobran barato
“Actualmente el servicio de seguridad está muy prostituido. ¿En qué sentido? En que los residentes y empresarios que requieren de este tipo de servicios están acostumbrados a ver la seguridad en el último término, a pesar de la inseguridad en que nos encontramos. No quieren pagar lo que vale la seguridad y contratan a empresas que no están debidamente registradas o bien no tienen la suficiente capacidad para dar este tipo de servicios.
“Esas pequeñas empresas cobran cerca de nueve mil 500 pesos al mes; con esto, ¿cuánto más se le puede pagar a un agente de seguridad, si hay que darlos de alta en el Seguro Social, comprar equipo y cubrir los gastos que tenemos como propietarios de una empresa de seguridad privada?
“Muchas empresas que están registradas no son de seguridad privada, por ejemplo en el caso de los hoteles están dados de alta para tener sus propios elementos de seguridad, porque además es un requisito que les pide la Secretaría de Seguridad Pública, así como los fraccionamientos residenciales que tienen sus propias empresas y guardias.
“En primer lugar no son empresas de seguridad, son requisitos que tienen que cumplir; segundo, son permisos que se pagan a nivel estatal y municipal y eso le conviene al gobierno. La competencia es sana y empresas como nosotros que tienen experiencia, personal capacitado y equipo marcan la diferencia”.
MAYOR CAPACITACIÓN
“Al personal de seguridad de los hoteles les hace falta mucha capacitación. La tecnología y los elementos cambian desde su ideología, la forma en que ven las cosas. Antes los clientes nos comentaban que la seguridad es la misma que roba, que contrataron determinada empresa y no les funcionó.
“Hay de empresas a empresas porque no todas tienen la capacidad para brindar el servicio de seguridad privada. Muchos se basan al costo, es decir, el hotel paga a su mismo empleado, da de alta a su misma gente y de esta manera tiene todo bajo control, pero cuando hay un robo carecen de una empresa que lo arrope, por tanto el problema queda dentro de casa.
“En la actualidad tocamos puertas en los hoteles que tienen su propia empresa de seguridad interna. Arropamos al cliente con patrullas, con investigaciones y otras herramientas; no solo se le da el guardia, sino que también se le proporciona la empresa en su totalidad, a través de varios servicios.
“Ya no es cobrar tanto por los servicios, sino por lo que debe ser, qué tipo de elementos necesitan. Si quieren un elemento que sea como Cantinflas, va a costar tanto, pero si quieren tener un Rambo les cuesta tanto, porque tengo que pagarle mínimo 30 mil pesos.
“Lo ideal sería basarnos en un costo básico y de ahí que se cobre hacia arriba. De esta manera se crea conciencia en todos los que quieran seguridad que van a pagar lo mismo, pero los extras ya no son parte de esa tarifa estándar y de acuerdo con la empresa. La competencia tiene que ser más sana, no basarse en los números sino en la preparación que tiene cada una”.
«Nuestra empresa tiene siete años de operación. Tenemos presencia en los municipios de Benito Juárez y Solidaridad, y brindamos servicios a hoteles, centros comerciales, condominios, obras de construcción, un sector que también se ha visto afectado por la inseguridad, y condominios, entre otras empresas que contratan este tipo de prestaciones.
“En los últimos tres años la demanda de los servicios de la empresa creció 60% entre la población en general. La situación actual está complicada, desafortunadamente todos los sectores han sido vulnerados de alguna manera por la inseguridad.
“Hace 20 años no te preocupabas en Cancún si alguien te seguía o veías sospechoso. Ahora las malas experiencias han hecho que aprendamos a cuidarnos solos y no le damos importancia a la seguridad hasta que sufrimos un hecho delictivo. Analizamos lo que debimos hacer, nos damos cuenta que pudimos hacer mucho más para evitar ser víctimas.
“La oportunidad del factor sorpresa en la delincuencia es lo que aprovechan y si la población no pone atención a este tipo de cosas, desde ahí somos vulnerables”.
SERVICIOS PROFESIONALES
“Actualmente los servicios de seguridad privada tienen una mayor demanda debido a que también creció la delincuencia e inseguridad en el país. Esto afortunada y desafortunadamente nos abrió la puerta para tener un mercado mucho más amplio y un mayor número de clientes interesados en la contratación de servicios profesionales de seguridad privada.
“También se observa un cambio en el enfoque de la sociedad hacia estos servicios. Antes el guardia cumplía funciones más por requisito o por temas de protección civil. Sin embargo, hoy en día hay una necesidad de servicios de seguridad privada profesional y debidamente establecidos.
“Cuando revalidamos las licencias para prestar el servicio de seguridad privada la autoridad nos exige otro tipo de documentos para el respaldo de las personas que trabajan con nosotros; estamos obligados a tener cursos de capacitación básica como primeros auxilios, incendios, prevención de acercamiento y trato con las personas.
“El personal a nuestro cargo se evalúa médicamente, presentan el estudio antidoping que se pide de manera anual. Son acciones positivas que al final repercuten en un servicio realmente seguro.
“Han minimizado un poco a las empresas que no cumplen ciertos requisitos, que vienen de otros estados, que carecen de fundamentos legales o los permisos necesarios para operar aquí. Se observa un importante crecimiento en el sector y lejos de ser una competencia resulta positivo desde el punto de vista de la profesionalización”.
CAMBIO A LAS LEYES
“Hoy en día es importante que se dé un cambio a fondo en nuestras leyes y en nuestra cultura ciudadana. Desafortunadamente la autoridad y nosotros como coadyuvantes de la autoridad ponemos a disposición a una persona que cometió un delito, pero el cliente tiene miedo de presentar una denuncia, desconfía y prefiere recuperar de alguna manera lo que perdió a presentar una denuncia, por la inseguridad que hay en la ciudad.
“Lograr una mayor conciencia de la población no solo depende de campañas sino de un todo. Se debe actuar como la parte de protección civil, desde la escuela. La población debe capacitarse poco a poco a medidas que le brinden mayor seguridad.
“Las nuevas tecnologías también juegan un papel fundamental en materia de seguridad. Las personas utilizan las redes sociales como un escaparate de su vida personal, suben fotografías de sus viajes y de su vida privada. En la actualidad son importantes, pero su uso debe tener otro enfoque que no ponga en riesgo la seguridad de las personas, darles otro sentido.
“Tenemos que aprender a cuidarnos; siempre debemos pensar y reflexionar antes de decir, comentar, postear y estar expuestos en la redes sociales, porque perdemos el control de nuestros datos personales”.