- Alejandro Rosel
- Comunicador y conductor
- Twitter: @AlejandroRosel7
Llega abril y con ello suceden dos temas importantes, que no deben ser considerados como menores, dada su trascendencia, en un futuro cercano. El primero: Las campañas electorales; sé que a la gran mayoría de la población, o no le interesan o son un dolor de cabeza, lo cual ha provocado a lo largo de los últimos procesos una disminución en la participación ciudadana, causando que unos pocos decidan el futuro de todos; así de simple. Este proceso decidirá el rumbo de los once municipios de Quintana Roo y las decisiones que se toman a nivel nacional desde la Cámara de Diputados, de ahí su importancia. La reelección se da por segunda vez en el estado y la primera de manera general por la cantidad de funcionarios que han decidido poner a consideración de los ciudadanos si continúan o no. La oportunidad es enorme para todos, continuidad o cambio, punto. Hoy estamos en otra oportunidad de escuchar, analizar, reflexionar y decidir por quién votar. Acudir a las urnas el 6 de junio y manifestar nuestras decisiones sobre nuestro rumbo futuro, en las urnas. No se vale no salir a votar y luego quejarse. Siempre lo he dicho: para exigir, uno debe participar, tomarse el tiempo para analizar y decidir; y sobre todo, acudir a las urnas. Lo demás, son patadas de ahogado. Hoy debes, porque puedes, decidir el futuro inmediato para ti y tu familia. No le hagas como el changuito, que no ve, no oye y tampoco habla. La oportunidad es única. Después ya no.
El segundo tema no es menor: Las vacaciones de Semana Santa, ojalá y cuando leas esto, te hayas cuidado, no hayas acudido a eventos masivos, reuniones con amigos o simplemente andar sin medidas en tus visitas; en resumen, a no salir a buscar al virus o lo que es peor, a la muerte. Es importante que entendamos que el proceso de vacunación va muy lento, que necesitamos estar vacunados arriba del 85 por ciento de toda la población, para lograr la famosa inmunización de rebaño y aun así, no significa que hayamos vencido a la enfermedad. Hoy la zona hotelera de Cancún y Playa del Carmen, justificado por el tema de la reactivación económica, lucen abarrotadas, con más gente de la permitida y con muy pocas medidas sanitarias; esto es increíble, dejar a las autoridades la responsabilidad de sancionar, multar o clausurar un lugar o varios, por unos cuantos pesos, empleos y muchas más muertes por Covid 19. ¿Qué tan complicado es, en serio, cumplir con lo establecido, detener la propagación y así avanzar en la recuperación económica? Parece que mucho. Dejo estas palabras invitándolos a reflexionar sobre el presente y el futuro, sobre lo que queremos para nosotros y nuestras familias. Cuídense y nos leemos pronto. Que el camino sea divertido y exitoso. Hasta la próxima.