Es innegable que desde hace un tiempo pareciera que todo el mundo toma colágeno; esto es porque no se trata de una moda, sino de un hábito que cada vez más personas asumen por sus satisfactorios resultados. Para nadie es un secreto que el colágeno marino es rico en minerales y vitaminas que lo convierten en un potente complemento para mantener la piel tersa, el cabello y las uñas sanas. Es por eso que se ha convertido en un ingrediente habitual en la cosmética y en el favorito de muchas personas.
Hay diferentes maneras de consumir colágeno. Puede ser el polvo, en cápsulas y/o en cremas. Sea cual sea tu manera predilecta de tomarlo, lo importante es mantenerlo en nuestra rutina de belleza y de cuidado personal, porque tiene beneficios estéticos y para la salud.
Es cierto que consumir colágeno te garantizará mantenerte en un buen estado físico. Pero no basta, los resultados los verás al combinar su consumo con disciplina, una dieta balanceada y ejercicio físico.
Recuerda que el colágeno se encuentra de manera natural en los huesos, tendones, ligamentos, cartílagos y piel, para garantizarles fuerza, elasticidad y promover su capacidad de recuperación.
El colágeno marino se puede encontrar en los pescados y suplementos enriquecidos con calcio, mineral básico para garantizar la fortaleza de los huesos fuertes, así como para prevenir fracturas y osteoporosis